Aunque hasta el momento no hay una fecha para volver a realizar eventos sociales en Puebla, los meseros del sector de banquetes pidieron la intervención de las autoridades para que los empresarios de este ramo otorguen seguridad social a sus trabajadores eventuales y cuenten con un servicio de salud ante el riesgo sanitario que implica retornar a la “nueva normalidad”.
Pedro Luna, en representación de los meseros de banquetes, hizo el llamado a la Asociación de Banqueteros para sumarse a esta propuesta, pues recordó que por más de 40 años los meseros de eventos sociales no han tenido servicio de seguridad social.
“Por eso es que hacemos ese llamado a la Asociación de Banqueteros para que podamos trabajar en conjunto y sí nos den ya seguro social porque ya son 40 años de todos los meseros que a nadie le han dado seguro social y creo que ya es momento porque no vamos a arriesgar nuestra integridad y a nuestras familias por esta pandemia”.
José Vargas, también en representación de los meseros de banquetes, reconoció que el apoyo que otorgó el Gobierno del Estado y el Ayuntamiento de Puebla fueron insuficientes para los casi 8 mil trabajadores del sector, pues solo recibieron 400 despensas de la administración estatal y 218 apoyos de 3 mil 500 pesos cada uno por parte del municipio.
Afirmó que fue más el apoyo que otorgaron los banqueteros a sus trabajadores, además de externos como el exgobernador de Puebla, Antonio Gali Fayad, quien les otorgó 100 apoyos económicos por un total de 50 mil pesos.
“400 despensas que fueron las que otorgó el estado, el señor Miguel Barbosa; 218 apoyos de 3 mil 500 y otras 40 despensas que fue lo que dio el Ayuntamiento; con el señor Gali fueron otros 100 y te puedo decir que lo que más ayudo fue la sociedad poblana porque todas las familias apoyaron a su mesero, esa fue la aportación más grande, te estoy hablando de 2 mil o 3 mil personas beneficiadas directamente porque la persona a la que le trabajan les habló y se solidarizó con ellos, pero de gobierno han de haber sido 800 o 900 personas”.
Finalmente, señaló que muchos de las personas que se quedaron sin trabajo por la falta de eventos sociales ahora se dedican a la seguridad privada o venden comida de forma informal.
“Muchos trabajando de seguridad privada, muchos independientes vendiendo gelatinas, empanadas, tortas, juguetes. La verdad es que ahorita el 100 por ciento de todos nosotros nos estamos dedicando a alguna actividad de venta”.