Jacobo, Margarita y Alfredo son tres jóvenes universitariosnativos de la Sierra Norte de Puebla. Así como han podido ver lapobreza, la violencia y la contaminación de sus lugares de origen,también tienen expectativas de que pueden apoyar a cambiar larealidad de sus comunidades, sobre todo con el viaje que harán enpróximos días a la Universidad de Stanford, en California,Estados Unidos.
Los estudiantes se preparan en la Universidad Intercultural delEstado de Puebla (UIEP), que les acercó la convocatoria parainscribirse en el programa de verano “Riesgos Globales:Biodiversidad, Seguridad y Gobernanza en Latinoamérica”, queofrece Stanford.
Luego de cumplir los requisitos, como hablar una lenguaoriginaria y tener un promedio mínimo de 8.5, los tres poblanosfueron seleccionados para ir al curso de verano, que estáauspiciado por la Embajada de Estados Unidos y por el InstitutoTecnológico Autónomo de México (ITAM). Irán a la universidadnorteamericana con otros cinco estudiantes del país.
Durante una visita a la capital poblana, los tres alumnoscoincidieron en que su expectativa es aprender de los profesores deEstados Unidos, pues en dicho país, las comunidades originariassufren menos racismo por parte de sus connacionales y de sugobierno. Tienen más inclusión.
Jacobo Diego Martínez tiene 21 años y estudia Lengua y Culturaen la UIEP. Es originario de Yohualichan, Cuetzalan; es guía deturistas en sus tiempos libres y ganó su lugar en el curso deverano por escribir un ensayo en el que contrastó lasoportunidades de su gente con las nuevas amenazas a las que seenfrentan, como la delincuencia o las adicciones.
Margarita Tirado Bautista tiene 22 años y estudia TurismoAlternativo; es procedente de Limonco, Cuetzalan. Su aspiración esque en el curso, se le oriente sobre proyectos económicos yproductivos que convivan con el entorno de los pueblos originarios;también espera aprender sobre gobernanza, seguridad ybiodiversidad. Ella habló a la Universidad de Stanford –en suensayo- acerca del clientelismo que ocurre en su comunidad, lafalta de educación en los jóvenes y de otros problemas queaquejan a su pueblo.
Alfredo Bautista Juárez, de 23 años de edad, estudia Derechocon Enfoque Intercultural. Es originario de Tuxtla, Zapotitlán deMéndez, y él desea aprender el funcionamiento del sistemapolítico en Estados Unidos, así como el Derecho Constitucionalaplicado para la procuración y administración de justicia de lospueblos originarios. Este joven es traductor y considera que esnecesario que haya más abogados que conozcan las lenguasoriginarias, como el totonaco, para dar mayor acceso a lajusticia.
El próximo 2 de julio, los estudiantes irán a la Ciudad deMéxico a un curso previo en el ITAM, y el 9 del mismo mespartirán a la universidad extranjera.
Los tres alumnos tienen la expectativa de conseguir una beca endicha universidad para un posgrado. Aun cuando la consigan, sudeseo es no abandonar a su comunidad y aportarle lo que puedanconocer del mundo.