El gobierno estatal gestiona recursos con Petróleos Mexicanos (Pemex) y con el gobierno federal para implementar un programa de reparación de escuelas en la zona conocida como “Triángulo Rojo”, el cual generaría puestos de trabajo y reducción de la incidencia delictiva.
De funcionar dicho programa, abarcaría los municipios donde se encuentran ductos de Pemex, como San Martín Texmelucan, Amozoc, Esperanza, Huauchinango y Zacatlán, por mencionar algunos.
El gobierno actual, que concluye funciones en julio busca que se aprueben mil millones de pesos para dicho proyecto, a repartirse entre los municipios afectados por el robo de combustible. Con el, hombres y mujeres con conocimientos en el área de construcción, podrían acceder a puestos de trabajo temporales formales.
El director del Comité Administrador Poblano para la Construcción de Espacios Educativos (Capcee), José Luis Ontañón, dijo que la gestión se realiza con Pemex y con Instituto Nacional de la Infraestructura Física Educativa (Inifed), que está por desparecer, por lo que serían las áreas federales a cargo de los espacios educativos, las que tendrían que retomar la petición.