La Fiscalía General de la República (FGR) y Petróleos Mexicanos (Pemex) ya indagan desde cuándo se instaló el llamado huachitúnel, que fue descubierto el viernes pasado en las inmediaciones de la Central de Abasto de la ciudad de Puebla, señaló José Martín Luna de la Luz, comandante de la XXV Zona Militar.
Con el objetivo de determinar el momento en que comenzó a operar el huachitúnel, e incluso cuantificar las posibles pérdidas de combustible que le generó a la nación dicha toma clandestina, especialistas forenses del gobierno federal ya investigan los hechos, confirmó el comandante Luna de la Luz.
“No tenemos conocimiento del tiempo que haya estado activa esa toma, ya los peritajes que haga Pemex [y la FGR] determinarán desde cuando estuvo operando esa toma, y desde cuándo tiene que le hicieron”, compartió.
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Del mismo modo, el líder militar señaló que la estructura ilegal fue detectada por funcionarios de Pemex a partir de un recorrido rutinario para dar mantenimiento al ducto que atraviesa por el estado de Puebla.
Fue entonces que se detectó un adelgazamiento anormal en la tubería, lo que ocasionó que se activara un protocolo conjunto con el Ejército Mexicano, Guardia Nacional, así como las policías Estatal y Municipal, esta última de Puebla capital.
“Siempre tenemos recorridos permanentes sobre los ductos, junto con Pemex, Guardia Nacional y el Ejército Mexicano (...) cuando localizamos tomas, [se denuncia] ante la autoridad federal correspondiente, entonces, se llevan a cabo los aseguramientos”, compartió.
A propósito, el comandante de la XXV Zona Militar enfatizó que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) realiza operativos permanentes junto con Pemex para detectar anomalías en los ductos, no obstante, la mayoría de hallazgos ocurre al momento de hacer mantenimiento a la infraestructura por la que atraviesa el combustible.
“Frecuentemente Pemex hace ese recorrido de los tubos, por medio del instrumental que se le conoce como ‘diablito’, para mantenimiento de las mismas tuberías, que muchas veces tienen corrosiones (...) Las tomas clandestinas producen algunos adelgazamientos por las perforaciones que hacen en los ductos”, añadió.
Aunado a lo anterior, y sin ahondar en particularidades del caso, debido a que argumentó que los mismos forman parte de una carpeta de investigación ministerial, Luna de la Luz confirmó que el huachitúnel tiene una longitud de 52 metros.
Finalmente, cabe recordar que el viernes pasado, después de seis horas de búsqueda, se encontró el túnel que iniciaba en una taquería situada en las inmediaciones de la Central de Abasto.
