La calle 5 de Mayo amaneció resguardada por los elementos de la policía municipal y estatal, a fin de inhibir la instalación de los comerciantes informales en el Centro Histórico de Puebla, pues no está permitido.
Desde tempranas horas se observaron a las fuerzas de seguridad que se distribuyeron en la calle 5 de Mayo entre la 6 y 10 Poniente.
Ahí también da rondines el personal del área de Vía Pública de la Secretaría de Gobernación Municipal (Segom), quienes tienen la tarea de no permitir que los ambulantes se instalen, por lo que en caso de que se haga el exhorto en dos veces y hagan caso omiso, la tercera vez ya es decomiso.
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Estas medidas se reforzaron luego de que el pasado 5 de julio los comerciantes informales regresaron a las calles y advirtieron que volverían a tomar sus lugares de trabajo de hace muchos años, pues no se les ofreció una alternativa para vender en la periferia de la ciudad como se les había prometido.
Lo anterior luego de cinco meses desde que el gobierno municipal los retiró de las principales calles de la ciudad, pues el número de vendedores en la vía pública había rebasado el espacio para transitar.
De acuerdo a las declaraciones pasadas del secretario de Gobernación, Jorge Arturo Cruz Lepe, a la llegada de una nueva administración se encontraron con un Centro Histórico sucio y ocupado por más de 5 mil ambulantes, por lo que decidieron actuar de a poco.
Fue en febrero de este año cuando se desplegó un operativo para que los comerciantes informales no colocaran sus puestos, desde entonces las calles de la 2 a la 14 Poniente- Oriente lucen sin mesas, comida, artículos electrónicos o más productos en la vía pública.
