Ser docente requiere de conocimientos y gran profesionalismo frente al grupo, pero hacerlo en medio de una contingencia sanitaria, fue un doble esfuerzo en el que pusieron a prueba su compromiso y dedicación.
Bajo este contexto y cara a la conmemoración del Día del Maestro, la rectora de la BUAP, María Lilia Cedillo Ramírez, expresó su admiración por la labor docente, ya que los académicos -quienes son modelos de inspiración para los jóvenes- tuvieron que enfrentar diversos retos durante la pandemia, como adaptarse a dar clases a distancia y apoyar a los estudiantes en aspectos emocionales.
“Fueron sus consejeros y hasta su paño de lágrimas en los momentos más álgidos de la pandemia. Los admiro, valoro su labor en el día a día. Si nuestra institución brilla y es grande es por cada uno de ustedes”, refirió
Ante esta dedicación, la rectora de la BUAP se comprometió a apoyar a este sector, a través de la entrega de definitividades y este año -informó- se lanzará una convocatoria en beneficio de los profesores hora clase con más de 10 años de labor académica. “Es un reconocimiento más que merecido a quienes llevan una carga fuerte en la institución”, destacó.
En este sentido, Carlos Armando Ríos Acevedo, secretario General de la Asociación Sindical del Personal Académico de la BUAP (ASPABUAP), tomó la palabra para destacar la importancia de reconocer la función docente, una labor gratificante. “Después de tres años de pandemia, tenemos la oportunidad de reunirnos y recordar a quienes ya no están con nosotros. Somos una universidad fuerte”, expresó el dirigente sindical.