La vida del relleno sanitario de Chiltepeque en el municipio de Puebla se acaba poco a poco, pues de tener una estimación de ocho años, actualmente le quedan seis, lo cual preocupa a regidores y ocupa a trabajadores del depósito final de basura que le apuestan a buscar alternativas tecnológicas que prevengan un desbordamiento del mismo, pues se encuentra al 100 por ciento de su capacidad.
Concientización de los residuos, estrategias que minimicen el volumen de los desechos, reciclaje y compactación de la basura son algunas opciones que se podrían implementar con ayuda tecnológica para no colapsar el relleno sanitario.
En entrevista con El Sol de Puebla, Francisco Romero Levet subdirector de Gestión Integral de Residuos Sólidos del Organismo Operador del Servicio de Limpia en el relleno sanitario aseveró que hablar sobre un desbordamiento es sumamente complejo, pues la volumetría es variante, ya que depende de la compactación y buen acomodo en las celdas.
En ese tenor sostuvo que es importante compactar los residuos antes de depositarlos en el relleno sanitario, así como pensar en estrategias tecnológicas que permitan alargar la vida del mismo y minimicen el volumen de basura.
Actualmente el relleno sanitario de Chiltepeque se encuentra al 100 por ciento de su capacidad, debido a las más de mil 500 toneladas de basura que se generan diariamente en la capital poblana.
De acuerdo con el Organismo Operador del Servicio de Limpia (OOSL), tras las grandes cantidades que se recolectan a diario, se le estiman seis años de vida, pero podrían ampliarse en caso de que se apruebe la instalación de una nueva celda, lo que conllevaría una mejora en cuanto al espacio y modo de operación de dicho relleno sanitario.
Para conocer el comportamiento del relleno, la actual administración ha realizado ocho estudios, por lo que Romero Levet subrayó que lo ideal es que estos no se dejen de lado, sino se les dé continuidad en la gestión entrante.
“Sería muy deseable que estos estudios que se hicieron en esta administración lo retomen las siguientes administraciones y alarguen el futuro del manejo de los residuos por más tiempo”, dijo.
En caso de aplicar medidas de tratamiento y de disposición se podría alargar una vida de alrededor de 10 años, lo que no descarta un futuro alentador y factible en cuanto al tratamiento de la basura.
En 1994 se licitó la construcción del relleno sanitario ubicado en Santo Tomás Chautla por parte del Organismo Operador del Servicio de Limpia (OOSL), en ese mismo año fue ganado por el entonces Grupo Aristos, quien posteriormente constituyó la empresa Rellenos Sanitarios RESA S.A. de C.V. la cual lo opera desde el 1 de enero de 1995.
El primer contrato pretendía finalizar en 2010, sin embargo, se solicitó extenderla desde cinco años previos a que finalizara y que se otorgó dos años antes de que pereciera, por ello el convenio de concesión se renovó por última vez el 28 de enero de 2008, lo cual en su momento alargó la vida útil del relleno otros 15 años, es decir; hasta el 2022.
SE DEBE ANALIZAR RENOVACIÓN DE CONCENSIÓN
Para los cabildantes panistas es necesario que la renovación de la concesión en 2022 se analice a profundidad, pues se opera de manera irregular, ya que RESA laboró tres años sin haber realizado construcciones para cambiar, mejorar las instalaciones o procesos autorizados inicialmente, toda vez que el proyecto original había contemplado su operación por 10 años, de 1995 a 2005 y fue hasta el año 2008 que se otorga la prórroga anticipada de la concesión con un nuevo proyecto.
A decir de la regidora Augusta Díaz de Rivera fue hasta el año 2012, que RESA obtuvo un dictamen emitido por un auditor certificado por la Entidad Mexicana de Acreditación (EMA) en el que se señaló el incumplimiento total de cinco reglas y parcialmente de una.
No cumplía con no ubicarse en fracturas o fallas geológicas, al momento de emisión del dictamen no contaba con un área de emergencia, no contaba con programa de monitoreo y no había construido los dos pozos de verificación.
Incumplía con un plan de regularización, y no en todos los casos contaba con un análisis de laboratorio, sino solo con una carta de la empresa generadora en la que expresaba los resultados. Por ello no había interés de operación del Relleno Sanitario conforme a la NOM-083-SEMARNAT-2003.
Asimismo, la panista sostuvo que en las reuniones que se han tenido para hablar de una probable prórroga, únicamente ofrecen la ampliación de la celda C y la reubicación de las torres de alta tensión de CFE, sin que haya mencionado la etapa del proyecto pendiente, al que se comprometió hace 15 años.
Así pues, recalcó que ya no puede considerarse un sitio adecuado para la disposición final de residuos, toda vez que se encuentra sobre el Sistema de Fracturamiento en el Valle de Puebla, por lo que no es factible aprobar un proyecto que comprometa más peso y volumen en ese mismo lugar.
CAPACIDAD DEL RELLENO DESENCADENA DEPÓSTOS DE MATERIAL DE CONSTRUCCIÓN
En una edición pasada esta casa editorial dio a conocer sobre tiraderos clandestinos, los cuales son predios que la ciudadanía utiliza como basureros de uso común sin permiso alguno, incluso algunos de ellos se encuentran a algunos metros del relleno sanitario de Chiltepeque.
Sin embargo, de acuerdo con Francisco Romero Levet, se trata de depósitos de material de construcción, los cuales son comunes verlos en los alrededores del relleno sanitario debido a que la gente busca poder asentarse en algún sitio, por lo que estas prácticas son para “emparejar” los terrenos y que puedan crear sus hogares.
“Lo que está pasando es que son depósitos de material de escombro, el manejo de residuos de la construcción es muy deseable por algunas gentes para hacer cimentaciones en sus casas, sí hemos nota que ha existido una cantidad de depósitos de material de construcción en particular alrededor del relleno sanitario porque la ciudad está avanzando hacia esa zona”.
No obstante, descartó que sean lugares en donde se tire basura, ya que manifestó que no han tenido reportes.
A decir de David Serrano Morales ejidatario del rancho de Santana, paraje las golondrinas ubicado en la junta auxiliar de San Francisco Totimehucan, la gente opta por dejar su basura en el predio pese a que el relleno sanitario está unos metros adelante.
La educación de la gente desencadena que no lleguen al punto y solo dejen su basura en donde se “se les dé la gana”, por lo que urgió estrategias que ayuden a evitar que sigan depositando la basura en los predios aledaños.
Como él también otros dueños de predios han manifestado una situación similar, sin embargo, ninguna autoridad se ha hecho cargo de la problemática, puesto que de un lado manifiestan que compete a la autoridad estatal y por el otro aseguran se debe regular por el gobierno del municipio de Puebla.
FALTA CULTURA DE RECICLAJE
Pese a que de acuerdo a la Encuesta Nacional de los Hogares el 43 por ciento de los capitalinos indicó aplicar una práctica de reciclaje, no es suficiente para combatir el exceso de basura que justo aumentó en las viviendas durante la pandemia de coronavirus.
Aun cuando el Ayuntamiento de Puebla anunció el programa “Puntos Verdes”, el cual cuenta con 90 sedes en toda la ciudad, el 67 por ciento de los ciudadanos señaló que está dispuesto a reciclar y un 33 por ciento manifestó que no cuenta con un lugar cercano para realizar esta actividad.
La cultura del reciclaje y concientización de los residuos que se generan a diario por cada poblano debe estar más presente, puesto que no solo desemboca en el tope del relleno sanitario, sino también se convierte en una causa de las inundaciones.
