Los recursos para el programa de protección social en salud, -antes direccionados al Seguro Popular, ahora Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi)-, mantienen una baja desde el 2017, al pasar de 4 mil 389.1 millones de pesos transferidos ese año por la federación a 3 mil 580.8 millones de pesos, que el gobierno del estado proyectó recibir conforme a la Ley de Egresos 2020.
Las estadísticas de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) exponen que durante el ejercicio fiscal 2017 el gobierno federal otorgó 4 mil 389.1 millones de pesos al Régimen Estatal de Protección en Salud, un año más tarde, en el 2018, los recursos ascendieron a los 4 mil 69.6 millones de pesos.
Las cifras advierten que la baja se prolongó en el 2019, ya que de enero a noviembre del año pasado la federación suministró recursos por 3 mil 875.7 millones de pesos, también en materia de protección en salud.
En tanto, la Ley de Egresos para el 2020, considera recursos por 3 mil 580.8 millones de pesos que serán ejercidos por la institución promovida por el gobierno federal, en este caso el Insabi que inició funciones a partir de este año.
Si se comparan los recursos transferidos por la federación en el 2017, con los proyectados para recibir en el 2020, la baja en los últimos años alcanzaría el 18.4 por ciento para el programa de protección en salud.
Durante la administración del presidente Enrique Peña Nieto, el Seguro Popular fue operado por el Sistema Nacional de Protección Social en Salud y de manera descentralizada en las entidades por los Regímenes Estatales de Protección Social en Salud, que en el caso de Puebla se encontraba bajo la figura de Organismo Público Descentralizado.
Cuando los recursos para protección social en salud eran para el Seguro Popular, los montos que obtenían los estados se estimaban con base en la cantidad de población afiliada, que en 2018 se encontraba en 3 millones 349 mil beneficiarios de los servicios en el estado.
Con la transformación del Seguro Popular a Insabi, ya no es necesario estar afiliado al programa, pues cualquier ciudadano puede presentar su Clave Única de Registro de Población (CURP) o la credencial de elector para tener acceso a los servicios de salud.