Después de siete meses cuando cerró su campaña como candidato y a un mes de la muerte de la exgobernadora Martha Erika Alonso Hidalgo, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, hizo su primera visita oficial a Puebla.
Aunque la semana pasada, de camino a Guerrero pasó por Chinantla, la de ayer en Huauchinango es la primera vez que el presidente de México está en la entidad luego del conflicto electoral por la gubernatura del estado entre el excandidato de la coalición Juntos Haremos Historia, Luis Miguel Barbosa Huerta, y la exgobernadora Martha Erika Alonso, justo a un mes del accidente aéreo en el que ella perdió la vida y a cuatro días de la elección de Guillermo Pacheco Pulido como gobernador interino.
La visita anterior de López Obrador a Puebla fue el sábado 23 de junio, día en que todavía como candidato presidencial, encabezó un mitin de cierre de campaña con candidatos locales, en la Plaza de la Victoria, en la zona cívica de Los Fuertes.
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Luego, evitó regresar a Puebla, argumentando días después de la jornada electoral del 1 de julio que la elección por la gubernatura del estado no se había resuelto, pues aunque los órganos electorales locales (el Instituto Electoral del Estado y el Tribunal Electoral del Estado de Puebla) declararon como gobernadora electa a Martha Erika Alonso, Barbosa Huerta impugnó los comicios.
Más adelante, el 9 de diciembre, un día después de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) ratificó el triunfo de la panista, ya en su calidad de presidente de México, descalificó el fallo diciendo que se había tratado de una decisión “antidemocrática” y anunciando que postergaría su visita al estado.
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Incluso, López Obrador no asistió a los funerales de Martha Erika Alonso, su esposo el exsenador Rafael Moreno Valle y sus acompañantes, el pasado 25 de diciembre, aunque posteriormente se informó que la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, ya había establecido comunicación con ella tres días antes del accidente.