Al menos 10 mujeres embarazadas han sido asesinadas a manos de sus parejas sentimentales en el estado de Puebla, de 2014 a la fecha.
Karla, Samaí, Paulina, Gudelia, Mireya, Susana, Alma, Iraís, Mercedes y Nayeli fueron ultimadas por disparos de arma de fuego, apuñaladas, estranguladas, degolladas, golpeadas y maniatadas, a una de ellas, incluso se le inyectó una sustancia tóxica que le provocó la muerte.
En todos los casos registrados, el móvil de los crímenes se trató del embarazo de las hoy occisas, debido a que los agresores –todos ellos del sexo masculino- intentaban evitar la paternidad.
En este sentido, es importante señalar que, tras los 10 asesinatos de las mujeres, siete presuntos feminicidas fueron detenidos, mientras que tres más se encuentran prófugos de la justicia.
Sin embargo, de los siete indiciados, únicamente dos han recibido una sentencia condenatoria por parte de la autoridad judicial. Se trata de José María N, quien fue condenado a 16 años de prisión por el delito de homicidio simple intencional en agravio de Paulina N, quien tenía 3 meses de embarazo, a pesar de que no se ha localizado el cuerpo de la joven.
Recientemente, el pasado 13 de mayo, Manuel N también fue sentenciado a 76 años de prisión por el crimen de su novia embarazada, Karla N; el sujeto fue acusado de los delitos de violación, feminicidio y aborto, perpetrado en contra del producto que la víctima llevaba en el vientre.
Del total de los 10 feminicidios, en el año 2015 ocurrieron 3 casos, seguido de 2014 con dos hechos violentos. En 2020, dos crímenes en contra de mujeres embarazadas se registraron en el estado y finalmente, durante 2016, 2017 y 2019, se suscitó el asesinato de una víctima por cada año. Fue 2018 el periodo en el que no se presentaron delitos de este tipo, a manos de parejas sentimentales.
Uno de los casos que causó mayor conmoción fue el feminicidio de Samaí, quien fue reportada como desaparecida el 17 de febrero del año 2016, cuando refirió a sus familiares que se reuniría con Rafael N, sujeto con quien mantenía una relación extramarital, ya que él era casado.
Samaí abordó un taxi, que presuntamente había enviado su expareja, Rafael; una vez dentro se contactó con sus familiares para decir que el conductor sólo estaba dando vueltas y no se supo más de ella, hasta tres días después, cuando fue localizado su cuerpo en el Oasis de Valsequillo con un disparo en la cabeza.
Tanto Rafael como Jesús, autor intelectual y material del feminicidio de Samaí, se encuentran detenidos.
Asimismo, Nayeli N fue ultimada en inmediaciones de la colonia La Ciénega, en noviembre del año 2019. Su expareja, Víctor N, fue detenido en estado de ebriedad tras caer en contradicciones en su declaración, pues señaló que sujetos desconocidos la asesinaron durante un intento de asalto, no obstante, el sujeto pretendió escapar de la escena del crimen.
Hoy se sabe que Nayeli tenía 26 años de edad y estaba a punto de ver nacer a su hijo, pues contaba con ocho meses de embarazo.
Uno de los sujetos que se encuentra a salto de mata, es el presunto feminicida de Mireya N, identificado como Daniel N, quien no conforme con degollar a su pareja sentimental, también asesinó a la hija de la víctima de sólo cuatro años de edad.
El crimen se registró el 11 de octubre de 2015 en la colonia Nuevo Paraiso, donde Daniel y Mireya se encontraban ingiriendo bebidas embriagantes, sin embargo, inició una discusión que terminó en una tragedia.
Fue la niñera de la menor, quien llegó un día después al domicilio de Mireya y encontró ambos cuerpos con una herida transversal en el cuello. La mujer señaló a las autoridades que su labor consistía en cuidar a la pequeña, ya que Mireya trabajaba por las noches ejerciendo la prostitución.