Los cuatro policías municipales de Puebla detenidos por la balacera ocurrida el pasado 24 de diciembre en la colonia Reforma Sur, fueron enviados al penal de San Miguel en tanto se resuelve su situación jurídica pues en su primera audiencia se calificó de legal su detención y se les acusó de tres delitos, entre ellos homicidio y abuso de autoridad.
Fuentes cercanas al caso revelaron que los oficiales detenidos son Miguel Ángel de 28 años de edad, Guadalupe Antonio de 24, Arturo de 34 y Sergio de 30 años de edad.
Los cuatro agentes policiacos del municipio de Puebla enfrentan acusaciones por homicidio calificado, lesiones calificadas y abuso de autoridad.
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El primero cometido en agravio de Guillermo N., 42 años de edad, y el cual era apodado “El Nene”, mientras que en el caso de las lesiones aparecen como víctimas Mariano de 38 años, Agustín N, y Cristina N. En tanto en el caso del abuso de autoridad es en contra de la sociedad.
De acuerdo con las fuentes consultadas los asegurados fueron llevados el día martes al Centro de Justicia Penal de Puebla donde a lo largo de casi ocho horas el agente del Ministerio Público explicó cómo ocurrió la detención de los uniformados municipales por lo que el juez de la causa calificó de legal el arresto y la retención de los cuatro oficiales.
Poco después el representante de la Fiscalía General del Estado de Puebla (FGE) expuso los datos de prueba que obran dentro de la carpeta de investigación mediante los cuales solicitó que los aprehendidos fueran vinculados a proceso.
A través de sus abogados particulares los detenidos solicitaron 144 horas para que en una segunda audiencia se resuelva si serán o no vinculados a proceso, mientras se ordenó que fueran enviados al penal de San Miguel bajo la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa en lo que se resuelve su situación jurídica.
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Los antecedentes
La madrugada del 24 de diciembre al número de emergencias 9-1-1 entró una llamada de auxilio en la que se solicitó la intervención de las autoridades policiacas debido a que un grupo de personas se encontraban escandalizando en la vía pública, ante ello policías municipales acudieron a la zona donde aún por motivos que no se han revelado, corretearon y dispararon contra los sospechosos cuyos familiares salieron a defenderlos.
Uno de los civiles de nombre Guillermo murió en el sitio, mientras su hermano acabó gravemente herido y tres más terminaron con lesiones en una pierna.
Desde entonces y para esclarecer los hechos, cuatro policías municipales involucrados en el caso fueron detenidos y puestos a disposición del agente del Ministerio Público.
