Uno de los tres hombres que murieron calcinados en una choza de adobe a escasos metros de la presidencia de Cuautlancingo la madrugada de ayer era tapicero, pero desafortunadamente cayó en el alcoholismo y esporádicamente ejercía su oficio.
Además se presume que como invitaba a sus amigos a refugiarse en ese domicilio para ingerir bebidas alcohólicas, prendieron una fogata pero el fuego alcanzó a prender algunos de los muebles que tenía acumulados para su reparación.
Una de las tres víctimas, se presume que sería el tapicero de nombre Delfino, incluso uno de los familiares se acercó al predio indicando que era hija del propietario del lugar, pero después se marchó.
Preliminarmente fuentes cercanas a la Fiscalía General del Estado indicaron que aún permanecen en calidad de desconocidos los tres cadáveres y que se llevará tiempo realizarles las correspondientes pruebas necro forenses y de genética, por las circunstancias en las que quedaron, para que puedan ser identificados y finalmente reclamados por los deudos.
¿Cómo ocurrió el siniestro?
Aquí se adelantó que fueron vecinos quienes al ver el fuego faltando pocos minutos para las 2 de la madrugada del lunes, en privada Francisco I. Madero y calle Miguel Hidalgo a la altura del número 9 en el barrio de El Perdón, llamaron de inmediato a los cuerpos de emergencias.
Fue así que poco después llegaron bomberos del municipio pero más tarde se sumaron los vulcanos del estado y así poco después lograron controlar y sofocar el siniestro en una casa de adobe y techo de tejas en un diámetro de 4 metros por 3 metros.
El fuego acabó con ropa y algunos muebles pequeños, como mesa y sillas de madera, además de diversos “esqueletos” de salas (sillones) que resguardaba el dueño para su compostura.
Desafortunadamente durante la remoción de escombros, los bomberos estatales localizaron primero en un rincón de la casa, dos cuerpos totalmente calcinados. Metros adelante, estaba un tercer cuerpo consumido por las llamas y aplastado por la estructura del techo que colapsó en su totalidad.
Ante eso policías municipales resguardaron el lugar y más tarde llegaron peritos y agentes ministeriales de la Fiscalía General del Estado del grupo de apoyo de San Pedro Cholula, quienes se encargaron de las diligencias del levantamiento de los cuerpos, con apoyo de Bomberos para el rescate de los cadáveres que por las condiciones en que estaban quedaron en calidad de desconocidos, refiriendo únicamente que serían varones los tres.
Solamente vecinos revelaron que ahí habitaban personas que viven en la indigencia y se dedican a recolectar material reciclable, pero además uno de ellos sería el señor Delfino, un tapicero que se volvió alcohólico y acostumbraba a meter a sus amigos del “escuadrón de la muerte” para beber hasta perderse. Entre esos “borrachitos”, agregó la gente qué hay uno de ellos que les apodaban “El Jerry” pensando que estarían entre los fallecidos.
Los cuerpos fueron llevados al anfiteatro para hacerles la autopsia de rigor y esperar a que alguien acuda a identificarlos y reclamarlos para darles debida sepultura.
Vecinos se encargaron del perro, mascota de las víctimas y ahí mismo lo enterraron en el patio frontal, dejándole encima dos grandes piedras.
Esperarán pruebas genéticas
Fuentes al interior de la Fiscalía indicaron que las tres víctimas siguen en calidad de desconocidas y que habrá que esperar el resultado de los estudios forenses y las pruebas genéticas que se van a realizar para poder obtener la causa de muerte y también permita su identificación.
Aunque ya hay un familiar que se presentó, tendrá que esperar alrededor de un mes para que se concluyan esos estudios.
Cabe señalar que aunque podría tratarse de un accidente, las investigaciones están llevándose bajo la carpeta número FGEP/EAT/FIM/HOMICIDIOS/025757/2022 hasta determinar lo que ocurrió realmente.