El registro de dos “tomas clandestinas” de hidrocarburo en una línea de ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex) que atraviesan por el municipio de Coronango, movilizó este día a personal de la empresa referida, así como de corporaciones federales, como la Guardia Nacional, para activar los protocolos correspondientes ante el derrame de material que fue visible y cuyo olor era percibido a varios metros de distancia.
Ante el hermetismo que prevalece en este caso, solo se confirmó que aparentemente quienes trataron de extraer el hidrocarburo, desde un predio de la junta auxiliar de San Francisco Ocotlán, situado a un poco más de 100 metros de la autopista Puebla-México, con sentido a la dirección de San Martín Texmelucan, lastimaron la tubería en dos puntos, generando con ello una “fuga” del mismo.
Lo anterior, alertó a vecinos y autoridades de los tres niveles de gobierno, donde los uniformados de Coronango fueron los primeros en arribar a la zona afectada.
Al llegar, encontraron una mancha negra de lo que se presume puede ser petróleo. Inmediatamente llegó personal de Pemex para iniciar las labores correspondientes, como el sellado de las “tomas” y evitar otra fuga.
El área de los trabajos es vigilada por elementos de la Guardia Nacional, Policía Estatal y Municipal, mientras personal de Pemex realiza lo conducente apoyado de maquinaria pesada.
Es importante decir que el lugar de los hechos, esta rodeado de algunas viviendas, varias de ellas habitadas y otras no.
También es necesario decir que es la segunda ocasión, en menos de una semana, que la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano rondan este territorio, donde gobierna el presidente municipal, Gerardo Sánchez Aguilar, quien continuamente es objeto de reclamos ciudadanos por la inseguridad que azota esta jurisdicción de la zona metropolitana de Puebla.
El pasado jueves, a unos kilómetros del punto donde hoy se reportaron dos “tomas clandestinas”, específicamente en el fraccionamiento Misiones de San Francisco, dos personas fueron privadas de la zona, en aparentemente una balacera.
