/ lunes 17 de agosto de 2020

Hace un año los sueños de Abi fueron truncados

El asesinato de la mujer de 28 años fue condenado por el gobernador, quien dijo que no quedaría impune, lo cual no se ha cumplido

El sueño de ver que su hija se graduara de la escuela secundaria y festejar sus XV años, además de ver crecer a su hijo menor, fue truncado a Judith Abigail, cuyo cadáver fue localizado hace un año y a la fecha, el crimen de la mujer de 28 años permanece en el olvido de las autoridades ministeriales, pese a la promesa del gobernador de que no quedaría impune.

La joven madre desapareció el 8 de agosto de 2019 después de acudir con un amigo al campo de tiro en la comunidad de San Baltazar Torija, perteneciente al municipio de Cuautinchán.

Al desconocer su paradero, familiares denunciaron ante las autoridades su desaparición y junto con amigos realizaron una campaña de búsqueda en redes sociales, medios de comunicación y acudieron a la zona donde se le vio por última vez para buscar rastros de la joven.

Foto: Héctor González | El Sol de Puebla

Fue de esta forma, por sus propios medios, como los familiares localizaron su cuerpo el día 16 de agosto, a un costado de la carretera a Santa Cruz Alpuyeca.

En entrevista, fuentes cercanas a la familia revelaron a EL SOL DE PUEBLA que a pesar de existir tres posibles líneas de investigación consideradas por los deudos, ninguna ha sido tomada en cuenta por la Fiscalía de Puebla, instancia que, según su dicho, ni las ha corroborado ni desechado, por lo que creen que se le ha dado “carpetazo” al caso.

EL AMIGO, PRINCIPAL SOSPECHOSO

La fuente consultada agregó que en la primera línea de investigación se señaló como principal sospechoso al amigo de Judith, ya que fue la última persona con la que estuvo “Abi”, como le decían de cariño.

Se trata de un gallero identificado como Jorge Eduardo N. alias “Lalo”, con quien aquel 8 de agosto de 2019 acudió a la liga de cazadores que se ubica en la mencionada comunidad ubicada en la zona de la presa de Valsequillo.

Foto: Cortesía

La víctima buscaba practicar en las distintas modalidades de tiro y caza, incluso aquel día, la joven envió, mediante redes sociales, una fotografía para que sus familiares vieran que se encontraba en el lugar y donde se le aprecia practicando con un arma.

La versión que dio Eduardo, al ser entrevistado por las autoridades ministeriales, fue que al regresar del campo de tiro sufrieron un accidente en el entronque de la carretera a Valsequillo y la desviación al municipio de Tecali de Herrera, donde terminaron volcados a bordo de la camionetas del hombre, una Hyundai de color blanco.

La fuente agregó que Eduardo, en su declaración ante el ministerio público, dijo que fue en ese momento cuando llegaron varios sujetos con armas de fuego y trataron de privar de la libertad tanto a él como a Judith Abigail, sin embargo, sólo consiguieron llevarse a la joven, pues él se quedó atorado con el cinturón de seguridad y no pudieron sacarlo; solamente vio como se la llevaron en una camioneta de color obscuro.

Sin embargo, durante la búsqueda que hicieron familiares y amigos en la zona del percance vial, se enteraron que los vecinos del lugar dijeron a las autoridades que, ellos, al darse cuenta del accidente, se acercaron a prestar ayuda y únicamente vieron a Eduardo, pero nunca se percataron de algún grupo armado e incluso que lo acompañara alguna mujer.

“Creemos que Eduardo está mintiendo o al menos oculta información de qué más pasó, incluso antes y después del accidente”, señalan los entrevistados.

En lo que respecta a Eduardo, dice la fuente, actualmente sigue su vida normal y ya no lo han citado las autoridades ministeriales, porque lo consideran una “víctima” y no lo relacionan a la desaparición y muerte de Judith Abigail.

Las personas entrevistadas por este medio, sostienen que él debería ser el principal sospechoso, ya que fue la última persona que estuvo con “Abi” y ahora que tratan de buscarlo, ya ni les contesta llamadas o mensajes.

Foto: Cortesía

LA EXPAREJA, SEGUNDO SOSPECHOSO

La fuente agrega que otra posible línea de investigación que ha sido ignorada por la Fiscalía es entorno a la expareja sentimental de Abigail, identificado como Brayan N, padre del menor que actualmente tiene dos años y medio de edad.

Poco saben de él, ya que no tuvieron mucho acercamiento cuando apareció al saber del deceso de Judith Abigail.

El hombre les dijo a los deudos que estaba en la milicia y que normalmente lo tenían “acuertalado” en distintos estados del país; sin embargo, al enterarse de la desaparición de su expareja, “extrañamente” renunció para viajar a Puebla y estar al pendiente del caso.

“Él pudo haber pedido un permiso especial y regresar más adelante a su trabajo, pues tanto como ayudar en resolver el caso de Abigail, para nada; y hoy vemos que al parecer no tiene un empleo fijo, además de que se aparece de vez en cuando, deja algunos pañales y leche para su hijo, pero solamente permanece 10 o 15 minutos y se marcha…, ahorita ya lleva algo de tiempo que no sabemos de él”, aseguro la fuente consultada.

Es así que la familia de Abigail es quien se ha venido haciendo cargo de los dos menores, tanto de la joven que acaba de cumplir 15 años, como del niño de 2.

EMBARGADA POR LA TRISTEZA EN SUS XV AÑOS

Hace unas semanas, la adolescente pasó embargada en la tristeza su graduación de la escuela secundaria y con mayor razón sus “XV Años”; sin embargo, le dedicó su certificado de estudios a su madre en el altar que le colocaron en su vivienda y donde precisamente esta semana que acaba de terminar se llevó a cabo el novenario para que hoy depositen la cruz sobre su sepultura por el cabo de año, según costumbres de sus familiares.

Foto: Cortesía

En dicha cruz la rememoran con el mensaje: “Vivirás en nuestra mente y corazón por los años que nos queden de vida. Te amamos infinitamente: Tu familia”.

Foto: Cortesía

DEUDOS MANDA TERCERA “SUGERENCIA”

El pasado mes de abril fue enviada al titular de la Fiscalía General del Estado, Gilberto Higuera Bernal, una sugerencia más de los deudos de una tercera posible línea de investigación.

Lo anterior, al darse a conocer la aprehensión de tres integrantes de una banda delictiva, implicados en la desaparición de dos hombres que iban a vender su vehículo en el municipio de Tecali de Herrera y de quienes hasta la fecha, se sabe, aún no aparecen.

Sobre este caso y tras la denuncia presentada por la esposa de una de las víctimas, se conoce que éstas iban a venderles una camioneta a los hermanos Ernesto y Oscar, dos meses y medio después de la muerte de Judith Abigail, es decir el 30 de octubre de 2019.

Foto: Fiscalía de Puebla

La Fiscalía de Secuestros y Delitos de Alto Impacto (FISDAI), la misma que lleva el caso de “Abi”, al hacer las correspondientes investigaciones, ubicó y detuvo en abril de este 2020, a los presuntos responsables: Ernesto y Oscar, además de un tercer sujeto identificado como Juan Anselmo.

Mediante un comunicado, las autoridades indicaron que presuntamente pertenecen a una banda dedicada al robo de vehículos y que acostumbraban dar muerte a sus víctimas. Al hacer una serie de cateos en un rancho que tienen los acusados en San Baltazar Torija y en un corralón donde anteriormente eran llevados los vehículos decomisados para el trasiego de “huachicol”, fueron encontrados partes de la camioneta que pertenecía a los dos hombres que aún siguen sin aparecer.

Actualmente ambos consanguíneos se encuentran presos en el penal de San Miguel, no por el delito de robo de vehículo, sino por homicidio y desaparición de persona forzada.

Foto: Fiscalía de Puebla

Fuentes cercanas a la familia de Judith Abigail, aseguraron que los hermanos actualmente presos podrían haber participado en la desaparición y muerte de “Abi”, dado al modus operandi con el que “trabajaban” en esa zona.

Por lo anterior, le pidieron al fiscal que lo consideré como una tercera línea de investigación, incluso indagar si Jorge Eduardo, el amigo de “Abi”, pudiera tener algún nexo con estas personas, debido a que él se desenvolvía en esa región.

DENUNCIAN CARPETAZO

Las fuentes cercanas a la familia denuncian ante este medio que al cabo de un año del crimen de Judith Abigail, las investigaciones propiamente están detenidas, incluso, aseguran, las autoridades de la Fiscalía tomaron como pretexto la pandemia para perder toda comunicación y dejar de contestar mensajes de los deudos, quienes quieren saber qué desarrollo tienen las pesquisas.

El pasado marzo fue la última vez que hubo un acercamiento entre autoridades y familiares de la víctima que siguen esperando que se haga justicia.

Incluso, agregaron, no se ha cumplido la promesa de que no quedaría impune el crimen y que hizo de manera pública en su cuenta de Twitter el gobernador Miguel Barbosa Huerta, un día después del hallazgo del cuerpo de “Abi”, pues el mandatario posteó el mensaje (SIC): “El feminicidio de Judit Abigail… agravia a la sociedad poblana. No quedará impune. Mi pésame y solidaridad con sus hijitos, madre, hermanas y familiares. El Estado está a prueba”.

“Prueba hasta el momento no superada”, finalizó la fuente.


El sueño de ver que su hija se graduara de la escuela secundaria y festejar sus XV años, además de ver crecer a su hijo menor, fue truncado a Judith Abigail, cuyo cadáver fue localizado hace un año y a la fecha, el crimen de la mujer de 28 años permanece en el olvido de las autoridades ministeriales, pese a la promesa del gobernador de que no quedaría impune.

La joven madre desapareció el 8 de agosto de 2019 después de acudir con un amigo al campo de tiro en la comunidad de San Baltazar Torija, perteneciente al municipio de Cuautinchán.

Al desconocer su paradero, familiares denunciaron ante las autoridades su desaparición y junto con amigos realizaron una campaña de búsqueda en redes sociales, medios de comunicación y acudieron a la zona donde se le vio por última vez para buscar rastros de la joven.

Foto: Héctor González | El Sol de Puebla

Fue de esta forma, por sus propios medios, como los familiares localizaron su cuerpo el día 16 de agosto, a un costado de la carretera a Santa Cruz Alpuyeca.

En entrevista, fuentes cercanas a la familia revelaron a EL SOL DE PUEBLA que a pesar de existir tres posibles líneas de investigación consideradas por los deudos, ninguna ha sido tomada en cuenta por la Fiscalía de Puebla, instancia que, según su dicho, ni las ha corroborado ni desechado, por lo que creen que se le ha dado “carpetazo” al caso.

EL AMIGO, PRINCIPAL SOSPECHOSO

La fuente consultada agregó que en la primera línea de investigación se señaló como principal sospechoso al amigo de Judith, ya que fue la última persona con la que estuvo “Abi”, como le decían de cariño.

Se trata de un gallero identificado como Jorge Eduardo N. alias “Lalo”, con quien aquel 8 de agosto de 2019 acudió a la liga de cazadores que se ubica en la mencionada comunidad ubicada en la zona de la presa de Valsequillo.

Foto: Cortesía

La víctima buscaba practicar en las distintas modalidades de tiro y caza, incluso aquel día, la joven envió, mediante redes sociales, una fotografía para que sus familiares vieran que se encontraba en el lugar y donde se le aprecia practicando con un arma.

La versión que dio Eduardo, al ser entrevistado por las autoridades ministeriales, fue que al regresar del campo de tiro sufrieron un accidente en el entronque de la carretera a Valsequillo y la desviación al municipio de Tecali de Herrera, donde terminaron volcados a bordo de la camionetas del hombre, una Hyundai de color blanco.

La fuente agregó que Eduardo, en su declaración ante el ministerio público, dijo que fue en ese momento cuando llegaron varios sujetos con armas de fuego y trataron de privar de la libertad tanto a él como a Judith Abigail, sin embargo, sólo consiguieron llevarse a la joven, pues él se quedó atorado con el cinturón de seguridad y no pudieron sacarlo; solamente vio como se la llevaron en una camioneta de color obscuro.

Sin embargo, durante la búsqueda que hicieron familiares y amigos en la zona del percance vial, se enteraron que los vecinos del lugar dijeron a las autoridades que, ellos, al darse cuenta del accidente, se acercaron a prestar ayuda y únicamente vieron a Eduardo, pero nunca se percataron de algún grupo armado e incluso que lo acompañara alguna mujer.

“Creemos que Eduardo está mintiendo o al menos oculta información de qué más pasó, incluso antes y después del accidente”, señalan los entrevistados.

En lo que respecta a Eduardo, dice la fuente, actualmente sigue su vida normal y ya no lo han citado las autoridades ministeriales, porque lo consideran una “víctima” y no lo relacionan a la desaparición y muerte de Judith Abigail.

Las personas entrevistadas por este medio, sostienen que él debería ser el principal sospechoso, ya que fue la última persona que estuvo con “Abi” y ahora que tratan de buscarlo, ya ni les contesta llamadas o mensajes.

Foto: Cortesía

LA EXPAREJA, SEGUNDO SOSPECHOSO

La fuente agrega que otra posible línea de investigación que ha sido ignorada por la Fiscalía es entorno a la expareja sentimental de Abigail, identificado como Brayan N, padre del menor que actualmente tiene dos años y medio de edad.

Poco saben de él, ya que no tuvieron mucho acercamiento cuando apareció al saber del deceso de Judith Abigail.

El hombre les dijo a los deudos que estaba en la milicia y que normalmente lo tenían “acuertalado” en distintos estados del país; sin embargo, al enterarse de la desaparición de su expareja, “extrañamente” renunció para viajar a Puebla y estar al pendiente del caso.

“Él pudo haber pedido un permiso especial y regresar más adelante a su trabajo, pues tanto como ayudar en resolver el caso de Abigail, para nada; y hoy vemos que al parecer no tiene un empleo fijo, además de que se aparece de vez en cuando, deja algunos pañales y leche para su hijo, pero solamente permanece 10 o 15 minutos y se marcha…, ahorita ya lleva algo de tiempo que no sabemos de él”, aseguro la fuente consultada.

Es así que la familia de Abigail es quien se ha venido haciendo cargo de los dos menores, tanto de la joven que acaba de cumplir 15 años, como del niño de 2.

EMBARGADA POR LA TRISTEZA EN SUS XV AÑOS

Hace unas semanas, la adolescente pasó embargada en la tristeza su graduación de la escuela secundaria y con mayor razón sus “XV Años”; sin embargo, le dedicó su certificado de estudios a su madre en el altar que le colocaron en su vivienda y donde precisamente esta semana que acaba de terminar se llevó a cabo el novenario para que hoy depositen la cruz sobre su sepultura por el cabo de año, según costumbres de sus familiares.

Foto: Cortesía

En dicha cruz la rememoran con el mensaje: “Vivirás en nuestra mente y corazón por los años que nos queden de vida. Te amamos infinitamente: Tu familia”.

Foto: Cortesía

DEUDOS MANDA TERCERA “SUGERENCIA”

El pasado mes de abril fue enviada al titular de la Fiscalía General del Estado, Gilberto Higuera Bernal, una sugerencia más de los deudos de una tercera posible línea de investigación.

Lo anterior, al darse a conocer la aprehensión de tres integrantes de una banda delictiva, implicados en la desaparición de dos hombres que iban a vender su vehículo en el municipio de Tecali de Herrera y de quienes hasta la fecha, se sabe, aún no aparecen.

Sobre este caso y tras la denuncia presentada por la esposa de una de las víctimas, se conoce que éstas iban a venderles una camioneta a los hermanos Ernesto y Oscar, dos meses y medio después de la muerte de Judith Abigail, es decir el 30 de octubre de 2019.

Foto: Fiscalía de Puebla

La Fiscalía de Secuestros y Delitos de Alto Impacto (FISDAI), la misma que lleva el caso de “Abi”, al hacer las correspondientes investigaciones, ubicó y detuvo en abril de este 2020, a los presuntos responsables: Ernesto y Oscar, además de un tercer sujeto identificado como Juan Anselmo.

Mediante un comunicado, las autoridades indicaron que presuntamente pertenecen a una banda dedicada al robo de vehículos y que acostumbraban dar muerte a sus víctimas. Al hacer una serie de cateos en un rancho que tienen los acusados en San Baltazar Torija y en un corralón donde anteriormente eran llevados los vehículos decomisados para el trasiego de “huachicol”, fueron encontrados partes de la camioneta que pertenecía a los dos hombres que aún siguen sin aparecer.

Actualmente ambos consanguíneos se encuentran presos en el penal de San Miguel, no por el delito de robo de vehículo, sino por homicidio y desaparición de persona forzada.

Foto: Fiscalía de Puebla

Fuentes cercanas a la familia de Judith Abigail, aseguraron que los hermanos actualmente presos podrían haber participado en la desaparición y muerte de “Abi”, dado al modus operandi con el que “trabajaban” en esa zona.

Por lo anterior, le pidieron al fiscal que lo consideré como una tercera línea de investigación, incluso indagar si Jorge Eduardo, el amigo de “Abi”, pudiera tener algún nexo con estas personas, debido a que él se desenvolvía en esa región.

DENUNCIAN CARPETAZO

Las fuentes cercanas a la familia denuncian ante este medio que al cabo de un año del crimen de Judith Abigail, las investigaciones propiamente están detenidas, incluso, aseguran, las autoridades de la Fiscalía tomaron como pretexto la pandemia para perder toda comunicación y dejar de contestar mensajes de los deudos, quienes quieren saber qué desarrollo tienen las pesquisas.

El pasado marzo fue la última vez que hubo un acercamiento entre autoridades y familiares de la víctima que siguen esperando que se haga justicia.

Incluso, agregaron, no se ha cumplido la promesa de que no quedaría impune el crimen y que hizo de manera pública en su cuenta de Twitter el gobernador Miguel Barbosa Huerta, un día después del hallazgo del cuerpo de “Abi”, pues el mandatario posteó el mensaje (SIC): “El feminicidio de Judit Abigail… agravia a la sociedad poblana. No quedará impune. Mi pésame y solidaridad con sus hijitos, madre, hermanas y familiares. El Estado está a prueba”.

“Prueba hasta el momento no superada”, finalizó la fuente.


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