A unas horas de que se reanude la audiencia en la que se leimputarán los delitos por los que es investigado Ricardo Alexis,el socio de Cabify señalado de ser el principal sospechoso de ladesaparición de Mara Fernanda, se confirmó que autoridadesministeriales hicieron un cateo en una vivienda de unfraccionamiento de Santa Ursula, Tlaxcala, donde hallaron ropa yotros objetos personales de la universitaria, además de rastros desangre. Esto podría dar indicios de que la joven desaparecidahabría sufrido violencia física e incluso sexual.
Para tener una certeza de lo ocurrido, hace unos momentos serealizó una diligencia en la que se le aplicó una prueba de ADNal chofer Ricardo Alexis, para relacionarlo con los hechos, por loque en la audiencia que está por reiniciarse podría haber un giroinesperado que permita esclarecer lo que ocurrió con laestudiante de la Upaep.
SE CUMPLEN SIETE DÍAS DE LA DESAPARICIÓN DE MARACASTILLO
Casi una semana después de la desaparición de Mara Castilla,su madre, Gabriela Miranda, dijo que “no se vale para mi hija nipara ninguna mujer, no se vale que por ser mujeres abusen”.
Mara desapareció la madrugada del sábado pasado cuandoregresaba a casa en un vehículo de servicio ejecutivo Cabifydespués de haberse divertido en un antro de Cholula. El chofer delautomóvil es ahora el principal sospechoso de ladesaparición.
“Ella tiene toda mi confianza, todo mi permiso para habersalido y no es justo que por haberse extralimitado en el tiempocomo cualquier adolescente, cualquiera que tengamos hijos sabemoscómo son los adolescentes, eso no le da derecho a alguien más dehaberla privado de su libertad”, reclamó su madre en entrevistacon ABC Radio.
La familia de la joven de 19 años no descarta ningunahipótesis en su desaparición, ni trata de blancas ni secuestro.“Realmente no hemos tenido hasta el momento ninguna noticia deMara, ni nos están pidiendo ningún rescate ni nada pero tampocopodemos decir que no se trate de un secuestro, no sabemos, no hemostenido noticias de nada”, explicó.
MARA TIENE MUCHAS GANAS DE VIVIR,AFIRMA SU MAMÁ
Gabriela sí descartó que su hija, estudiante de tercersemestre de la licenciatura en Ciencias Políticas en laUniversidad Popular Autónoma del estado de Puebla (Upaep), pudierahaberse ido, o siquiera entablado conversación, con undesconocido, como resultaba para ella el chofer de Cabify.
“Es una chica que tiene muchas ganas de vivir, que tienemuchos propósitos en la vida. Es una chica alegre, que tienemuchos amigos, que no habla casi con la gente que no conoce peroque tiene muchas ganas de vivir”, señaló.
Los familiares y amigos de Mara están viviendo un infierno,reconoció Gabriela, desde el sábado pasado. “Todos estamosviviendo una angustia tremenda porque ya son siete días yquisiéramos tener de regreso a mi hija Mara y aún no tenemosninguna noticia de ella”, afirmó. “Mara, donde quiera queestés, hija, por favor, aguanta. Aguanta hija, que te vamos aencontrar”.