Por el delito de homicidio en razón de parentesco, la madre y el padrastro del menor Steven, fueron vinculados a proceso por un juez de control, quien ordenó que prevaleciera la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa.
Asimismo, el juez de la causa concedió plazo de cuatro meses de investigación complementaria.
Por lo anterior, los acusados, Aarón N, y Jackelin N, fueron devueltos al Cereso de San Miguel, donde deberán permanecer todo el tiempo que duren las indagatorias en su contra.
Es de recordar que la muerte del pequeño de un año y tres meses de nacido, ocurrió la mañana del pasado 26 de agosto en un domicilio de la calle Calvario. A través de una llamada al 911, vecinos del lugar alertaron a las autoridades sobre lo acontecido por lo que policías municipales, paramédicos y agentes ministeriales se trasladaron a la zona.
Ahí confirmaron el deceso del pequeño, el cual presentaba diversos y quemaduras, incluso se presumió que había sido ahorcado. En ese momento, las autoridades policiacas arrestaron tanto a la madre del menor como al padrastro, de tal manera, que la Fiscalía del Estadio inicio a una carpeta de investigación por el delito de violencia familiar.
Una vez judicializado el caso, Aarón N, y Jackelin N, fueron señalados de homicidio calificado, ahora reclasificado por un juez, como homicidio en grado de parentesco, incluso en la primera audiencia en la que se calificó de legal la detención de los acusados, se supo que el bebé presentó 20 lesiones, sin embargo, lo que lo mató fue un golpe en la cabeza.
De igual forma, quedó al descubierto que fue la abuela materna quien reclamó el cadáver del menor de edad, para darle cristiana sepultura, en tanto, los presuntos responsables de la muerte del pequeño seguirán en la cárcel hasta que se defina si son o no culpables del delito que se les imputa.