/ sábado 14 de agosto de 2021

De Poder a Poder | ¿Se fortalecerá el morenovallismo con la reelección de Genoveva Huerta?

Con el pretexto de fortalecer la “paridad de género” en el PAN, Marko cortés “plancha” la reelección de Genoveva Huerta en Puebla al decidir que éste fuera uno de los 14 estados donde deberá ser una mujer quien presida (otra vez) el comité Directivo Estatal. Con ello vuelve la división en el blanquiazul, ya que una vez más los tradicionales (yunques) son desplazados, en primera porque los tres hombres de este grupo habían levantado la mano para ocupar dicha posición están fuera de la jugada y en segunda por no contar con una fémina con el liderazgo suficiente para competir al “tú por tú” con la actual presidenta, quien sin duda sigue acaparando el poder. Solo hay que recordar que además se auto regaló la candidatura plurinominal de una diputación federal, y que pronto despachará también en la Cámara baja.

Lo que menos esperaban Rafael Micalco, Marcos Castro y Francisco Frayle, es que el líder nacional se sacara el as bajo la manga con algo irrebatible como es el apoyo a la paridad de género. Por ello cayó como un balde de agua fría la noticia, con la cual sin duda Genoveva “amarra” tres años más la presidencia estatal, en los que sin duda seguirá privilegiando a su grupo, como lo hizo recientemente con el nombramiento de nuevos integrantes del Comité Directivo Estatal.

Los tres confiaban en que la campaña que venían realizando al interior del estado les rindiera frutos y al ser analizado en el CEN su posicionamiento estatal, alguno de ellos tuviera esta posición que permitiría que los tradicionales recuperaran el partido que les fue arrebatado por el difunto Rafael Moreno Valle, quien integró un grupo de neo panistas no numeroso pero si intocable, el cual ahora está desbalagado. Este poco a poco ha sido cobijado por Genoveva, quien lo aprovechará para sus propios fines e intereses, que ya no son los de su “maestro” y creador ya fallecido.

LA NOTICIA GENERÓ UN GRAN RECHAZO

Principalmente los panistas de “élite” mostraron de inmediato un gran rechazo hacia la decisión del CEN del PAN. No cuestionan que se haya reservado la presidencia para una mujer, pero sí que sea para la misma Genoveva a quien acusan de haber impuesto en las pasadas elecciones a candidatos “impresentables”. Asimismo que no se haya dejado participar en la lucha por dicha posición a los tres hombres que habían levantado la mano. Y por si fuera poco argumentan que con esta medida se fortalecerá al moreno vallismo y se volverá a relegar a la militancia, y Puebla no será imparcial en la elección del próximo presidente del CEN del PAN, pues Genoveva ya comprometió el voto a favor de Marko Cortés.

Pero no son solo los líderes de diversos grupos yunquistas, sino también los que se han formado en el interior del estado quienes no quieren que se siga destruyendo al PAN, pues vieron cómo se perdieron importantes posiciones en las elecciones pasadas, en donde el blanquiazul tuvo un fuerte descalabro. Algunos todavía esperan que no se consolide la reelección de Genoveva y que alguna de las panistas tradicionales que son bien vistas por la militancia participe en la puja. Asimismo una reacción del alcalde electo Eduardo Rivera Pérez, que podría enviar a la contienda a un nuevo perfil femenino, con todo el apoyo para que con acuerdos políticos con el CEN, pueda triunfar y el partido empiece a recobrar el poder perdido entre la ciudadanía.

EN EL PRI TAMBIÉN SE “COCINA” LA REELECCIÓN

Y para demostrar que también en el PRI “también hace aire” y que aún con la peor derrota de todos los tiempos y con la pérdida de la mayor parte de su militancia, puede tener el premio de la reelección, Néstor Camarillo el actual presidente del CDE se enfoca a repetir en el puesto, y (como la panista) también con el apoyo del líder nacional, en su caso de Alejandro Moreno, a quien le ha garantizado que Puebla le aportará los votos suficientes para que permanezca en el cargo.

La noticia en el PRI fue, que durante la reunión de consejo en la que solo estuvieron presencialmente 35 consejeros de “elite” y 557 virtualmente, se aprobó que el método de selección del nuevo presidente fuera a través de la reunión de consejo y no con participación de la militancia u otra de sus opciones. Con ello Néstor e Isabel Merlo, aseguran su permanencia. Ellos llegaron en 2020, impuestos por “Alito”.

Y NO SE OCULTARON LAS INCONFORMIDADES

Lo anterior también provocó inconformidad entre varios grupos que se están reuniendo para analizar la situación, pues consideran que se requiere de una dirigencia fuerte, y que la actual no lo es, pues además de ser producto de la imposición, su actuación ha sido errática y tan es así que no logró levantar al partido durante el pasado proceso electoral, en el que sin alianza el PRI solo logró 21 de las 217 alcaldías que estuvieron en juego, cuando en comparación con el 2018 se lograron 76, número todavía aceptable si se toma en cuenta el avasallamiento de MORENA.

Si Néstor Camarillo se queda como presidente, lo que es probable que así sea, pues la oposición a ello está débil, ¿qué puede ofrecer después del fracaso electoral?. ¿Nuevas alianzas?..¿más deserciones?..¿menos trabajo?., seguramente que así será o por lo menos es lo que en éstos momentos se vislumbra ya que aquí en Puebla el PRI sigue a la baja y sin visos de recuperación.

Lo que pone en evidencia todo lo anterior es que a quienes actualmente ostentan el poder al interior del antes poderoso tricolor, solo les importa su bienestar, hacerse de las escasas posiciones, casi todas ellas plurinominales. Sin trabajar por las causas sociales , tampoco volver a contar con la estructura ahora en manos de MORENA y de otras fuerzas menores, y que era su gran pilar. En fín el que Néstor permanezca en el tricolor no será trascendente sin duda, porque no habrá cambios notables, ya que él dividirá su tiempo entre el partido y su labor como diputado en el congreso del estado, que por cierto obtuvo como plurinominal. ¡pobre PRI!.

mariagarciasolis@hotmail.com

Con el pretexto de fortalecer la “paridad de género” en el PAN, Marko cortés “plancha” la reelección de Genoveva Huerta en Puebla al decidir que éste fuera uno de los 14 estados donde deberá ser una mujer quien presida (otra vez) el comité Directivo Estatal. Con ello vuelve la división en el blanquiazul, ya que una vez más los tradicionales (yunques) son desplazados, en primera porque los tres hombres de este grupo habían levantado la mano para ocupar dicha posición están fuera de la jugada y en segunda por no contar con una fémina con el liderazgo suficiente para competir al “tú por tú” con la actual presidenta, quien sin duda sigue acaparando el poder. Solo hay que recordar que además se auto regaló la candidatura plurinominal de una diputación federal, y que pronto despachará también en la Cámara baja.

Lo que menos esperaban Rafael Micalco, Marcos Castro y Francisco Frayle, es que el líder nacional se sacara el as bajo la manga con algo irrebatible como es el apoyo a la paridad de género. Por ello cayó como un balde de agua fría la noticia, con la cual sin duda Genoveva “amarra” tres años más la presidencia estatal, en los que sin duda seguirá privilegiando a su grupo, como lo hizo recientemente con el nombramiento de nuevos integrantes del Comité Directivo Estatal.

Los tres confiaban en que la campaña que venían realizando al interior del estado les rindiera frutos y al ser analizado en el CEN su posicionamiento estatal, alguno de ellos tuviera esta posición que permitiría que los tradicionales recuperaran el partido que les fue arrebatado por el difunto Rafael Moreno Valle, quien integró un grupo de neo panistas no numeroso pero si intocable, el cual ahora está desbalagado. Este poco a poco ha sido cobijado por Genoveva, quien lo aprovechará para sus propios fines e intereses, que ya no son los de su “maestro” y creador ya fallecido.

LA NOTICIA GENERÓ UN GRAN RECHAZO

Principalmente los panistas de “élite” mostraron de inmediato un gran rechazo hacia la decisión del CEN del PAN. No cuestionan que se haya reservado la presidencia para una mujer, pero sí que sea para la misma Genoveva a quien acusan de haber impuesto en las pasadas elecciones a candidatos “impresentables”. Asimismo que no se haya dejado participar en la lucha por dicha posición a los tres hombres que habían levantado la mano. Y por si fuera poco argumentan que con esta medida se fortalecerá al moreno vallismo y se volverá a relegar a la militancia, y Puebla no será imparcial en la elección del próximo presidente del CEN del PAN, pues Genoveva ya comprometió el voto a favor de Marko Cortés.

Pero no son solo los líderes de diversos grupos yunquistas, sino también los que se han formado en el interior del estado quienes no quieren que se siga destruyendo al PAN, pues vieron cómo se perdieron importantes posiciones en las elecciones pasadas, en donde el blanquiazul tuvo un fuerte descalabro. Algunos todavía esperan que no se consolide la reelección de Genoveva y que alguna de las panistas tradicionales que son bien vistas por la militancia participe en la puja. Asimismo una reacción del alcalde electo Eduardo Rivera Pérez, que podría enviar a la contienda a un nuevo perfil femenino, con todo el apoyo para que con acuerdos políticos con el CEN, pueda triunfar y el partido empiece a recobrar el poder perdido entre la ciudadanía.

EN EL PRI TAMBIÉN SE “COCINA” LA REELECCIÓN

Y para demostrar que también en el PRI “también hace aire” y que aún con la peor derrota de todos los tiempos y con la pérdida de la mayor parte de su militancia, puede tener el premio de la reelección, Néstor Camarillo el actual presidente del CDE se enfoca a repetir en el puesto, y (como la panista) también con el apoyo del líder nacional, en su caso de Alejandro Moreno, a quien le ha garantizado que Puebla le aportará los votos suficientes para que permanezca en el cargo.

La noticia en el PRI fue, que durante la reunión de consejo en la que solo estuvieron presencialmente 35 consejeros de “elite” y 557 virtualmente, se aprobó que el método de selección del nuevo presidente fuera a través de la reunión de consejo y no con participación de la militancia u otra de sus opciones. Con ello Néstor e Isabel Merlo, aseguran su permanencia. Ellos llegaron en 2020, impuestos por “Alito”.

Y NO SE OCULTARON LAS INCONFORMIDADES

Lo anterior también provocó inconformidad entre varios grupos que se están reuniendo para analizar la situación, pues consideran que se requiere de una dirigencia fuerte, y que la actual no lo es, pues además de ser producto de la imposición, su actuación ha sido errática y tan es así que no logró levantar al partido durante el pasado proceso electoral, en el que sin alianza el PRI solo logró 21 de las 217 alcaldías que estuvieron en juego, cuando en comparación con el 2018 se lograron 76, número todavía aceptable si se toma en cuenta el avasallamiento de MORENA.

Si Néstor Camarillo se queda como presidente, lo que es probable que así sea, pues la oposición a ello está débil, ¿qué puede ofrecer después del fracaso electoral?. ¿Nuevas alianzas?..¿más deserciones?..¿menos trabajo?., seguramente que así será o por lo menos es lo que en éstos momentos se vislumbra ya que aquí en Puebla el PRI sigue a la baja y sin visos de recuperación.

Lo que pone en evidencia todo lo anterior es que a quienes actualmente ostentan el poder al interior del antes poderoso tricolor, solo les importa su bienestar, hacerse de las escasas posiciones, casi todas ellas plurinominales. Sin trabajar por las causas sociales , tampoco volver a contar con la estructura ahora en manos de MORENA y de otras fuerzas menores, y que era su gran pilar. En fín el que Néstor permanezca en el tricolor no será trascendente sin duda, porque no habrá cambios notables, ya que él dividirá su tiempo entre el partido y su labor como diputado en el congreso del estado, que por cierto obtuvo como plurinominal. ¡pobre PRI!.

mariagarciasolis@hotmail.com