/ sábado 31 de julio de 2021

La lucha interna por el CDE y "el PAN con lo mismo" pueden hundir al partido

Si no se da una verdadera renovación en el Comité Directivo Estatal del PAN con líderes que emerjan de los nuevos cuadros o de la militancia convencida y fiel que ha sabido esperar a tener una oportunidad, y los grupos continúan con enfrentamientos, lo que va a suceder es que este partido se hundirá más. Aun cuando ganó la alcaldía de Puebla, sus números en votación no fueron los mejores, y si no hubiera realizado esa alianza que para muchos no deja de ser incomprensible, su debacle sería histórica. Es por ello que los de “élite” que pelean dicha posición y que son “pan con lo mismo”, tienen que decidir entre ayudar a su instituto haciéndose a un lado o seguir con una lucha que lo dejará muy mal parados.

A los que han levantado la mano como Francisco Fraile, Rafael Micalco, y Genoveva Huerta, no se les niega su experiencia y conocimiento de las profundidades de este partido, pero ellos ya tuvieron su oportunidad, y también problemas que salieron a la luz antes o después de haber sido los líderes estatales, pero hay muchos panistas tradicionales más, que sin duda impondrían un nuevo sello al blanquiazul, que no tienen cola que les pisen y que cuentan con muchos menos detractores, lo cual permitiría que si alguno de ellos triunfara, tuviera más aceptación y apoyo y pudiese llevar a cabo una verdadera renovación con miras al 2024.

Afortunadamente todavía no sale la convocatoria para la elección de una nueva directiva, por lo que hay esperanzas de que otros panistas distinguidos se pudiesen inscribir y la militancia sabia tenga de donde escoger. La reelección de Genoveva Huerta, dicen varios azules, sería pan con lo mismo y se correría el riesgo de que el grupo moreno-vallista se apodere aún más del PAN. Sólo hay que observar quienes fueron los candidatos a puestos de elección popular y también a quienes incluyó recientemente en los cambios que realizó en el Comité para “empoderar” al partido, que no fue otra cosa que colocar a sus incondicionales, para tener apoyo para su reelección. Incluyó en su proyecto el nombramiento de Eduardo Alcántara su más cercano colaborador, como coordinador de la bancada del PAN en el congreso del Estado y quien recientemente aceptara que hay una fuerte ruptura al interior del blanquiazul, noticia que ya no es noticia.

Respecto al ex pastor Paco Fraile con 46 años de militancia, y a Rafael Micalco, sabedores como Genoveva, de la importancia de convencer a los pocos panistas de arraigo que hay todavía en el estado, han intensificado un trabajo ampliamente publicitado, con visitas a los diversos liderazgos del interior del Estado. Asimismo con propaganda en redes sociales y entrevistas en las que coinciden que con la actual presidenta, la heredera política del ex gobernador Rafael Moreno Valle, se ha perdido la apertura, el diálogo y la democracia en el PAN.

En cuanto a Marcos Castro, gente de Eduardo Rivera Pérez, se identifica con el ala yunquista pero le hace falta trabajo partidista que le permita convencer sin mayor problema a los militantes, pues es una figura de alcances menores todavía al interior del PAN. Un punto poco favorecedor de los aspirantes es que a través de sus campañas, se han dedicado a “sacarse sus trapitos al sol”, sin hablar de los principios humanistas y vinculatorios a las ideas de la democracia cristiana, ni a las necesidades de la población, sino solo a la grilla política dejando atrás esa ideología que ha sido el principal motor por el que la población aún sin militar en el partido, simpatice con él y lo haya llevado a triunfar. En fin, si llegan los actuales aspirantes, se dice, sólo será pan con lo mismo y seguirán las peleas entre grupos, lo cual puede conducir a seguir hundiendo aquí a su partido.

EN MOVIMIENTO CIUDADANO LA SITUACIÓN ES SIMILAR AL PAN

Los chapulines y los que creyeron que trabajar en el Partido Movimiento Ciudadano era su oportunidad de participar en un instituto diferente a la situación que prevalecía en los militaron antes, se equivocaron rotundamente ya que es en realidad en éste también es “pan con lo mismo” y las posibilidades de ascender son prácticamente nulas, pues ya tiene un grupo de poder, que no tiene la menor intención de dejar pasar a nadie más que no sea en sus líderes ya identificados. Esto último se deduce de la reciente visita del Delegado Nacional de la cuarta circunscripción de éste, quien vino a darle “la bendición” a Fernando Morales Martínez para que se reelija por tres años más en la presidencia de este partido a nivel estatal.

Se supo que el consejo político del MC ya emitió la convocatoria para que los interesados en participar en la contienda interna puedan inscribirse. Sin embargo tal parece que quienes lo hagan será para aparentar una democracia inexistente a todas luces, pues al parecer Fernando ya amarró la reelección con Dante Delgado Ranauro el dueño del partido, así como lo hizo primero con la diputación local plurinominal en la que se anotó como como el 1°, lo que le permitirá ser el único legislador del MC en la próxima legislatura local. Si bien es cierto que las cifras logradas en la elección del 6 de Junio no fueron malas para este instituto, lo es también que carece de estructura, de una bien definida militancia, así como ideología, por lo que aquí su consolidación aún se ve lejos.

Lo que también es cierto que al interior del partido hay mucho intereses y que quienes tuvieron la experiencia e ilusión de participar en éste en las pasadas elecciones comprobaron que no hay democracia interna y que todo se maneja a conveniencia de los dueños y de sus cercanos, o sea que son iguales a todos, ¿o no?. Una buena lección para los ilusos y los de buena fe, que por cierto ya desaparecieron del mapa político del MC como lo hicieron antes del PRI y de otros institutos en los que militaron alguna vez, y de los que por cierto sí tuvieron tanto oportunidades como triunfos, ahora lejanos.

mariagarciasolis@hotmail.com

Si no se da una verdadera renovación en el Comité Directivo Estatal del PAN con líderes que emerjan de los nuevos cuadros o de la militancia convencida y fiel que ha sabido esperar a tener una oportunidad, y los grupos continúan con enfrentamientos, lo que va a suceder es que este partido se hundirá más. Aun cuando ganó la alcaldía de Puebla, sus números en votación no fueron los mejores, y si no hubiera realizado esa alianza que para muchos no deja de ser incomprensible, su debacle sería histórica. Es por ello que los de “élite” que pelean dicha posición y que son “pan con lo mismo”, tienen que decidir entre ayudar a su instituto haciéndose a un lado o seguir con una lucha que lo dejará muy mal parados.

A los que han levantado la mano como Francisco Fraile, Rafael Micalco, y Genoveva Huerta, no se les niega su experiencia y conocimiento de las profundidades de este partido, pero ellos ya tuvieron su oportunidad, y también problemas que salieron a la luz antes o después de haber sido los líderes estatales, pero hay muchos panistas tradicionales más, que sin duda impondrían un nuevo sello al blanquiazul, que no tienen cola que les pisen y que cuentan con muchos menos detractores, lo cual permitiría que si alguno de ellos triunfara, tuviera más aceptación y apoyo y pudiese llevar a cabo una verdadera renovación con miras al 2024.

Afortunadamente todavía no sale la convocatoria para la elección de una nueva directiva, por lo que hay esperanzas de que otros panistas distinguidos se pudiesen inscribir y la militancia sabia tenga de donde escoger. La reelección de Genoveva Huerta, dicen varios azules, sería pan con lo mismo y se correría el riesgo de que el grupo moreno-vallista se apodere aún más del PAN. Sólo hay que observar quienes fueron los candidatos a puestos de elección popular y también a quienes incluyó recientemente en los cambios que realizó en el Comité para “empoderar” al partido, que no fue otra cosa que colocar a sus incondicionales, para tener apoyo para su reelección. Incluyó en su proyecto el nombramiento de Eduardo Alcántara su más cercano colaborador, como coordinador de la bancada del PAN en el congreso del Estado y quien recientemente aceptara que hay una fuerte ruptura al interior del blanquiazul, noticia que ya no es noticia.

Respecto al ex pastor Paco Fraile con 46 años de militancia, y a Rafael Micalco, sabedores como Genoveva, de la importancia de convencer a los pocos panistas de arraigo que hay todavía en el estado, han intensificado un trabajo ampliamente publicitado, con visitas a los diversos liderazgos del interior del Estado. Asimismo con propaganda en redes sociales y entrevistas en las que coinciden que con la actual presidenta, la heredera política del ex gobernador Rafael Moreno Valle, se ha perdido la apertura, el diálogo y la democracia en el PAN.

En cuanto a Marcos Castro, gente de Eduardo Rivera Pérez, se identifica con el ala yunquista pero le hace falta trabajo partidista que le permita convencer sin mayor problema a los militantes, pues es una figura de alcances menores todavía al interior del PAN. Un punto poco favorecedor de los aspirantes es que a través de sus campañas, se han dedicado a “sacarse sus trapitos al sol”, sin hablar de los principios humanistas y vinculatorios a las ideas de la democracia cristiana, ni a las necesidades de la población, sino solo a la grilla política dejando atrás esa ideología que ha sido el principal motor por el que la población aún sin militar en el partido, simpatice con él y lo haya llevado a triunfar. En fin, si llegan los actuales aspirantes, se dice, sólo será pan con lo mismo y seguirán las peleas entre grupos, lo cual puede conducir a seguir hundiendo aquí a su partido.

EN MOVIMIENTO CIUDADANO LA SITUACIÓN ES SIMILAR AL PAN

Los chapulines y los que creyeron que trabajar en el Partido Movimiento Ciudadano era su oportunidad de participar en un instituto diferente a la situación que prevalecía en los militaron antes, se equivocaron rotundamente ya que es en realidad en éste también es “pan con lo mismo” y las posibilidades de ascender son prácticamente nulas, pues ya tiene un grupo de poder, que no tiene la menor intención de dejar pasar a nadie más que no sea en sus líderes ya identificados. Esto último se deduce de la reciente visita del Delegado Nacional de la cuarta circunscripción de éste, quien vino a darle “la bendición” a Fernando Morales Martínez para que se reelija por tres años más en la presidencia de este partido a nivel estatal.

Se supo que el consejo político del MC ya emitió la convocatoria para que los interesados en participar en la contienda interna puedan inscribirse. Sin embargo tal parece que quienes lo hagan será para aparentar una democracia inexistente a todas luces, pues al parecer Fernando ya amarró la reelección con Dante Delgado Ranauro el dueño del partido, así como lo hizo primero con la diputación local plurinominal en la que se anotó como como el 1°, lo que le permitirá ser el único legislador del MC en la próxima legislatura local. Si bien es cierto que las cifras logradas en la elección del 6 de Junio no fueron malas para este instituto, lo es también que carece de estructura, de una bien definida militancia, así como ideología, por lo que aquí su consolidación aún se ve lejos.

Lo que también es cierto que al interior del partido hay mucho intereses y que quienes tuvieron la experiencia e ilusión de participar en éste en las pasadas elecciones comprobaron que no hay democracia interna y que todo se maneja a conveniencia de los dueños y de sus cercanos, o sea que son iguales a todos, ¿o no?. Una buena lección para los ilusos y los de buena fe, que por cierto ya desaparecieron del mapa político del MC como lo hicieron antes del PRI y de otros institutos en los que militaron alguna vez, y de los que por cierto sí tuvieron tanto oportunidades como triunfos, ahora lejanos.

mariagarciasolis@hotmail.com