Y en esa combinación, los campeones Pericos de Puebla serespaldaron para volver a meterse a la final de la zona Sur alliquidar por segundo año consecutivo a los Tigres de Quintana Rooen cuatro juegos consecutivos.
De plano, Pericos tiene una paternidad clara sobre los Tigres,porque en las tres últimas ronda de play-offs se los hadespachado, y no solo eso, suma ya once triunfos consecutivos en lapostemporada sumando los tres últimos en la final del Sur del2014.
Los verdes se han desquitado con creces después de que losTigres impidieron en el 2009 que los Pericos llegaran a su primerafinal de la Liga Mexicana, bajo ese nombre y con el nuevo formatode competencia, en toda su historia.
Aquella vez los felinos ganaron en cinco partidos en el mismoparque Hermanos Serdán.
Pero de ahí para acá cambió todo, y las dos últimas han sidoverdaderos humillaciones, rematadas en el mismo estadio del equipode Bengala.
Josh Roenicke y Josh Outman lanzaron dos verdaderas joyas en elparque Hermanos Serdán, y apoyados por los cuadrangulares de RickyRodríguez –con casa llena-, Julio Borbón y Chuy Arredondo, y elbateo oportuno de Issmael Salas, los verdes dieron dos golpescerteros para tomar la delantera.
Ya en Cancún, Jaime Lugo no desentonó. Logró una épicalabor, mientras de nueva cuenta Jesús Arredondo se echaba alequipo a hombros con par de bambinazos para dar el tercer tiro enla frente.
En el cuarto partido había dudas con Andrés Meza, pero elderecho mostró su clase, su maestría, ese talento que loconvirtió en uno de los mejores lanzadores de la última década,para trabajar cinco entradas en blanco. Aguantar el duelo, y alfinal sus compañeros resolvieron todo en la novena entrada paraconsumar la barrida.
Qué decir del bullpen que se portó a la altura.
Ya decíamos que Tim Johnson no necesitaba más.
Que con Mario Morales, Julio Félix y Duente Heath bastaba yasí fue.
Entre los tres hicieron labores épicas, sobre todo Morales queen el cuarto juego entró en un momento de tremendo apremio ylogró colgar un cero de oro para impedir una posible reacción delos felinos.
El único que desentonó fue el zurdo Fabián Williamson, aquien recurrieron en el tercer juego para enfrentar a JesúsValenzuela y terminó regalándole el boleto.
De ahí en fura, todos se fajaron y cumplieron como losgrandes.
Cuatro carreras en 36 entradas, una de ellas inmerecida,significa un milimétrico 0.75 de efectividad del pitcheo poblanoen la serie contra Tigres. Es decir, menos de una carrera por cadanueve episodios.
¡Fantástico!
A la defensiva también el equipo lució de maravilla, con unsolo pecado cometido por Héctor Garanzuay en el octavo episodiodel segundo juego que costó una carrera, pero que no le alcanzó alos Tigres para reaccionar.
Con nueve campeones, apuntalados por un grupo de guerreros, losPericos están defendiendo a capa y espada esa corona queconquistaron la campaña anterior.
En tanto Tim Johnson cuando fue necesario recurrió a la pelotapequeña, buscando siempre dar el primer golpe, y a sabiendas deque sus abridores estaban que no creían en nadie.
Ahora en el camino están de nueva cuenta los Leones de Yucatánque dominaron de punta a punta la zona Sur y lograron barrer encuatro juegos a los Bravos de León.
Una historia similar a la de la campaña anterior cuando losLeones eran amplios favoritos como punteros del Sur, y los Pericoscomo segundo lugar, los liquidaron en cuatro partidos.
A la segunda final consecutiva del Sur entre ambos, llegan enlas mismas circunstancias, como primero y segundo de la zona, perocon la experiencia de que ya en postemporada hay borrón y cuentanueva.
En la campaña regular, los Leones dominaron los enfrentamientosentre sí 5-4, pero en postemporada, los amos y señores son losPericos que han cepillado en las tres series previas a losmelenudos.
Así como Saltillo y Diablos se han convertido en el terror delos Pericos, así han sido los verdes para los Leones.
En 2009 y 2010, los Pericos liquidaron a los Leones en laprimera ronda en cinco y seis juegos, respectivamente, y el añopasado en la final del Sur también los dominaron en seispartidos.
El año pasado, Pericos se trajo la serie empata de Mérida;aquí ganó los dos primeros y estuvo cerca de liquidarlos en elHermanos Serdán, pero los melenudos forzaron el regreso, y allálos poblanos sellaron su pase a la gran final.
La batalla final del Sur comenzará hasta el jueves en elKukulcán, donde se jugarán los dos primeros, y aquí la actividadestá pactada para domingo 27, lunes 28 y martes 29 en caso de sernecesario.
Los Pericos entrenarán lunes y martes en el Hermanos Serdán, yel miércoles emprenderán el vuelo rumbo a Mérida, donde esperantraerse uno por lo menos, para comenzar a construir su camino rumboa la gran final del circuito, y seguir dando satisfacciones a laafición poblana, y a su dueño Gerardo Benavides, cuya felicidadno pudo ser redonda después de la eliminación de losAcereros.
Por cierto Los Acereros ya le dieron las gracias a su managerJorge Luis Loredo, y no se descarta que el nuevo timonel del equiponorteño emerja del cuerpo técnico de Pericos.
Un abrazo para la familia Valero Flores, en especialpara mi amigo Israel, por el sensible fallecimiento de su señoramadre, este fin de semana, ¡Descanse en paz!