Con menos de un año de distancia para que se realice la Copa Mundial de la FIFA en Qatar, las preocupaciones sobre los derechos humanos y los de la comunidad LGBTI+ que aplican en el país siguen manteniéndose.

Desde su elección como país sede en 2010, diversas organizaciones y autoridades pidieron se modificarán las políticas sobre los homosexuales en Qatar. Esto no ocurrió, pero los organizadores del evento más grande del futbol afirmaron que los aficionados de esta comunidad no deben tener preocupaciones y podrán ser parte del evento. Pero, tendrán que respetar la cultura del país si desean asistir.

ORGANIZADORES Y SU INVITACIÓN A LA COMUNIDAD

Nasser Al Khater, director ejecutivo del comité organizador del Mundial, reiteró que todos los aficionados son bienvenidos en el país y reiteró que todos estarán seguros. Como lo señaló la FIFA anteriormente, buscan que se cumpla el objetivo de realizar un torneo inclusivo.

“La noción de que la gente no se siente segura aquí es falsa. Lo he dicho antes y les digo esto de nuevo, todos son bienvenidos aquí. Todos son bienvenidos aquí y todos se sentirán seguros aquí”, indicó Al Khater en una entrevista para CNN. “Qatar es un país tolerante. Es un país acogedor. Es un país hospitalario”.

Cuestionado sobre si el país aplicará sus leyes contra los aficionados homosexuales, al ser la homosexualidad entre hombres prohibida en el país, explicó que se trata de un tema cultural, por lo que pidió a los fans que asistan respetar las tradiciones del país.

“En diferentes países, hay más indulgencia con las demostraciones públicas de afecto. Qatar y la región son mucho más modestos, y Qatar y la región son mucho más conservadores. Y esto es lo que les pedimos a los fanáticos que respeten. Y estamos seguros de que los fanáticos respetarán eso”, comentó el director ejecutivo del comité organizador. “Respetamos las diferentes culturas y esperamos que otras culturas respeten la nuestra”.

Los cuestionamientos comenzaron cuando Josh Cavallo, el primer jugador en declararse gay en el futbol profesional y originario de Australia, señaló que estaría asustado de jugar en Qatar. Aunque no es seleccionado actual de su país, ya ha participado con las categorías menores, por lo que podría darse la posibilidad.

Ante las palabras del futbolista, Nasser indicó que no debería de sentir miedo y que Qatar ha sido tratado de manera injusta desde que recibió el nombramiento de sede del Mundial.

“Al contrario, le damos la bienvenida aquí en el estado de Qatar, le damos la bienvenida para que venga a ver incluso antes del Mundial… Nadie se siente amenazado aquí, nadie se siente inseguro”, reiteró el directivo qatarí.

QATAR Y SUS LEYES CONTRA LA HOMOSEXUALIDAD

Dentro de Qatar, un país islámico, sus leyes se rigen bajo el Sharia, ley religiosa que forma parte de la tradición islámica. Por ello, la homosexualidad ha estado prohibida con un castigo de hasta cinco años de cárcel en un principio.

Pero, esto se modificó levemente en 2004 cuando se incluyó el artículo 296 en su Código Penal donde se establece la prohibición de la homosexualidad masculina. Por ello, a los hombres se les culpa de sodomía y pueden recibir una pena de uno a tres años en prisión.

La pena de muerte también se considera, pero en casos donde los musulmanes son descubiertos en una relación sexual extramarital con otro hombre, pero no se tiene registro de que se haya aplicado.

Por las costumbres culturales, el travestismo se ve de igual forma de manera negativa, mientras que el cambio de género es ilegal. El matrimonio entre parejas del mismo sexo es ilegal. No se permite a las personas hacer campaña en favor de los derechos LGBT, tampoco existen leyes para evitar la discriminación, como para castigar a las empresas que se nieguen a contratar a alguien por su preferencia sexual.

Tanto la adopción como su ingreso a las fuerzas militares es ilegal. Solo tienen permitido donar sangre y existe un consentimiento ambiguo sobre las llamadas terapias de conversión.

FIFA Y SUS PROBLEMAS CON LA COMUNIDAD

Para la FIFA, aceptar a la comunidad LGBTI+ tampoco ha sido un tema históricamente sencillo. Tras elegir a Qatar como sede, Sepp Blatter, expresidente del organismo, bromeó ante los cuestionamientos al señalar que los miembros de la comunidad solo debían de abstenerse de cualquier actividad sexual, por lo que tuvo que disculparse después.

Debido a que el país no cuenta con censura sobre los símbolos de la comunidad, la FIFA solo ha garantizado hasta ahora que se permitirá mostrar banderas arcoíris o mensajes que promuevan la inclusión.

Su decisión resulta contradictoria cuando la UEFA rechazó que el Allianz Arena, estadio en Múnich, Alemania, durante la pasada Eurocopa en el mes de junio que pudiera ser iluminado con los colores del arcoíris. La selección alemana planeó el movimiento como una respuesta a las leyes anti-LGBT promovidas en Hungría. Al final, la UEFA se escudó al señalar que no podía involucrarse el deporte en cuestiones políticas.

La Copa Mundial de futbol ya también estuvo envuelta en polémicas similares cuando en Rusia 2018 muchos países publicaron advertencias para sus aficionados de la comunidad LGBT. En Rusia, las demostraciones de afecto entre personas del mismo sexo están prohibidas, además, en aquel momento el gobierno de Vladimir Putin impulsó de manera fuerte leyes para evitar imágenes o mensajes de apoyo en favor de la homosexualidad.