Autoridades de los Estados Unidos por medio de la Casa Blanca pidieron a la NASA que establezca una nueva zona horaria específicamente para la Luna, es decir, un sistema para conocer cuál es la hora que transcurre cuando algo sucede en el satélite de la Tierra.
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Esta zona horaria tendrá por nombre “Tiempo Lunar Coordinado (LTC)” y se regirá con el Tiempo Universal Coordinado (UCT) y el objetivo es que pueda presentarse para finales de 2026.
Hay que señalar que, en la Luna, el tiempo es diferente al de la Tierra debido a que se mueve un poco más rápido cada día, 58.7 microsegundos para ser exactos. Esta pequeñísima diferencia podría complicar las posiciones de los satélites, comunicaciones y otro tipo de interacciones humanas que quieran realizarse.
¿Por qué se busca crear una zona horaria en la Luna?
De acuerdo a un memorando publicado el pasado 2 de abril por la Casa Blanca, la intención de crear un uso horario en la Luna se debe a que en los próximos años los esfuerzos para regresar al humano a este satélite se intensificarán, incluso con la intención de establecer ahí una base.
La Oficina de Política de Ciencia y Tecnología de la Casa Blanca (OSTP, por sus siglas en inglés), detalló que esta zona horaria tiene que cumplir con cuatro puntos:
Tener trazabilidad al Tiempo Universal Coordinado (UTC), que es el principal estándar de tiempo utilizado a nivel mundial.
Precisión suficiente para respalda la navegación y la ciencia de precisión.
Resiliencia a la pérdida de contacto con la Tierra.
Escalabilidad a entornos espaciales más allá del sistema Tierra-Luna.
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“A medida que la NASA, las empresas privadas y las agencias especiales de todo el mundo lanzan misiones a la Luna, Marte y más allá, es importante que establezcamos estándares de tiempo celeste para seguridad y precisión”, explicó Steve Welby, subdirector de Seguridad Nacional de OSTP en un comunicado.
“El tiempo pasa de manera diferente en diferentes partes del espacio; por ejemplo, el tiempo parece pasar más lentamente donde la gravedad es más fuerte, como cerca de los cuerpos celestes, y como resultado, la duración de un segundo en la Tierra es diferente para un observador en diferentes condiciones gravitacionales, como en la Luna. Una definición coherente del tiempo entre los operadores en el espacio es fundamental para el éxito de las capacidades de conocimiento de la situación espacial, la navegación y las comunicaciones todo lo cual es fundamental para permitir la interoperabilidad en todo el gobierno de los Estados Unidos y con socios internacionales”, añadió.
Al contar con un uso horario, la Casa Blanca aseguró que podrá permitir las operaciones cislunares. Para conseguirlo, la NASA trabajará con los Departamentos de Comercio, Defensa, Estado y Transporte de los Estados Unidos.
Todo esto gira alrededor del proyecto Artemis, uno de los más ambiciosos de la NASA y que busca llevar de regreso al humano a la Luna antes de septiembre de 2026. Este forma parte de los pasos para que la humanidad llegue a Marte, ya que se busca establecer una base lunar para que el viaje al llamado planeta rojo sea menos complicado.
Países como China e India ya también tiene la intención de enviar naves tripuladas a la Luna. En el caso del país chino planean hacerlo antes de que finalice esta década, mientras que la India busca lograrlo antes del 2040.
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Ya en el espacio existen formas para medir el tiempo, la NASA cuenta con métodos como el “tiempo de evento de nave espacial”, para seguir eventos clave de las misiones. Mientras que, los astronautas en la Estación Especial se guían por el Tiempo Universal Coordinado. Hasta ahora no se sabe si en la Luna existirá más de un horario por región o si solo será uno para todo el territorio.
