El agua es un recurso natural indispensable para la vida en la Tierra, además de ser necesario para la salud de los seres humanos, también se ocupa en diferentes industrias para producir alimentos, medicamentos, herramientas, materias primas y otro tipo de productos más que son considerados básicos para la población global.
Los especialistas mencionaron que el planeta está rodeado de este elemento, pero solo una pequeña parte puede ingerirse, por lo que se han puesto en marcha diferentes estrategias para buscar que a nadie le falte, ya que en algunos países se han presentado varios problemas de escasez, tal es el caso de Eritrea, Papúa Nueva Guinea o Uganda.
Para atender esta problemática un grupo de expertos trabajó para darle un nuevo uso al grafeno, que es una sustancia con diferentes propiedades. De esta manera se espera que pueda servir para hacerle frente a los inconvenientes relacionados con el estrés hídrico al convertirse en un factor clave para la producción de este recurso.
¿Qué es el grafeno?
Es un material con diferentes propiedades que es considerado uno de los más innovadores debido a todas las aplicaciones que se le pueden dar. Ha llamado la atención de distintas industrias que lo quieren añadirlo a sus procesos de fabricación.
Su invención se le atribuye a Andrei Gejm y Konstantin Novosiol, quienes gracias a esta idea lograron ser acreedores al Premio Nobel de la Física en el 2004. Del mismo modo, la Unión Europea ha desarrollado más investigaciones para que puedan darle otras finalidades.
Entre sus principales características resalta la de ser un conductor del calor y la electricidad, es casi transparente y absorbe el 2,3% de la luz blanca. Lo que puede ser útil en diferentes contextos como en redes eléctricas o fuentes de luz.
¿Cuál es su relación con la escasez?
Entre las propiedades que tiene el grafeno se encuentra la de ser permeable, es decir, que los líquidos pueden atravesar de un lugar a otro a través de sus poros, por lo que ha sido posible que se use en proyectos de filtración.
Especialistas de la Universidad Khalifa de los Emiratos Árabes Unidos (EAU) trabajan en un estudio en el que buscan generar un proceso de desalinización con la ayuda de este material, por lo que podrán tomar el agua salada y convertirla en potable.
Hassan Arafat, director del Centro de Investigación e Innovación en Grafeno y Materiales 2D (RIC2D), está realizando esta investigación con una membrana mejorada con grafeno, esto con el objetivo de crear un proceso más eficiente y económico para tratar lo que hay en los océanos.
Todavía faltan varias fases para que el proyecto pueda estar listo, no obstante, los expertos de EAU adelantaron que su propuesta dejará un impacto duradero en los problemas internacionales relacionados con este recurso vital.