Una mujer sorprendió al darse a conocer su historia en redes sociales tras derrumbar la casa de tres pisos en la vivía junto con sus hijos solo para que la familia de su expareja no se quedara con nada de su patrimonio.
Yumiko Ramírez es el nombre de la mujer y la historia ocurrió en Chancay, región del Perú, en donde causó gran revuelo y tiene todos a la expectativa por conocer como se resuelve su situación.
Consultada por varios medios como La República, la mujer decidió contar más sobre las razones que la llevaron a tomar una decisión como esa con su patrimonio y por el duro conflicto que vive con sus exsuegros.
“Yo mandé a derrumbarlos porque fue mi esfuerzo, me sacrifiqué por años. Tengo bastantes pruebas sobre el tema de mis hijos, cuando el abuelo decide desalojarme. Tengo audios donde el propio papá le dice a mi hijo: ‘Estoy esperando que ustedes salgan, tienen que entregar todo el terreno’. No le dice a mi hijo en ningún momento: ‘Hijo, ustedes quédense, yo les voy a criar’”.
La situación no ha sido fácil para la mujer, ya que, desde que se dio a conocer el caso, ha recibido constantes amenazas de muerte y comentarios negativos, no solo de la familia de su exesposo, también de otros que no opinan igual que ella en el caso.
“Es lamentable que exista esa gente. Ahí está la maldad en todo su esplendor, materialistas son todos. Solo pido disculpas a mis hijos por darle de familia a esa gente que no vale la pena, pero seguiré luchando contra todos esos”, afirmó.
Actualmente la mujer vive en casa de su mamá con tres de sus cuatro hijos, debido a que uno de ellos estudia en la capital Lima en Perú, y se mantiene a la espera de lo que pueda ocurrir con su caso.
“Yo me dedico a la cocina y no puedo usar mis cosas del restaurante porque están amontonadas en la casa derrumbada. Lo que me pasa mi expareja no me alcanza porque mi hijo de 20 años está en la universidad”, aseguró.
¿Cómo se originó el problema con la casa y su terreno?
La situación de Yumiko Ramírez se dio a conocer el 26 de septiembre cuando decidió demoler la casa de tres pisos en la que vivía después de que su exsuegro, de nombre Pablo Vega, solicitara al Poder Judicial que desalojara el inmueble.
A pesar de que no existía una resolución del Poder Judicial, ella decidió priorizar su tranquilidad y la de sus hijos, por lo que derrumbó lo que ella había construido para dejarles solo el terreno.
“Yo mandé a hacer eso por el motivo que me estaban desalojando a mí y a mis hijos ya que no se había llegado a ningún acuerdo ni al modo de pago para los trámites de documentación (posesión de terreno). Ahorita, yo puedo estar posicionada todavía en mi casa porque no hay fecha ni hora de cerraje para que vayan a sacarme de esa casa”, añadió.
El terreno sí es en realidad de su exsuegro y él comenzó la construcción con un solo cuarto que materializó gracias a un préstamo, pero una vez que Yumiko Ramírez se casó con su esposo Ricardo Vega comenzaron a construir el resto de la vivienda, varios de los cuartos incluso con apoyo de los padres de la mujer y el dinero que le prestaban.
La mujer se mantiene casada por lo civil con Ricardo Vega, a pesar de que tienen más de una década separados y la disputa legal contra los padres de su expareja arrancó cuando ella decidió denunciar para recibir una pensión alimenticia.
Respecto a la familia del esposo, el suegro Pablo Vega asegura que el desalojo solo aplicaba contra la mujer y no contra sus nietos, y la demolición de la casa ya ha sido detenida por el área de Fiscalización de la Municipalidad de Chancay y la Policía Nacional del Perú.