El clima y la forma en cómo se seca la ropa, son dos factores que pueden influir en los olores raros de las prendas después de lavarlas, como el de la humedad, sobre todo en época de invierno cuando la temperatura en el exterior es baja y la humedad aumenta debido a las lluvias y demás fenómenos meteorológicos.
Y es que, en esta temporada del año el secado es más tardado de lo habitual, por lo que, en muchas ocasiones, si tenemos malas prácticas hay que volverlas a lavar, ya que el olor de la humedad es muy difícil de quitar.
Si este tipo de problemas es frecuente en tu vida, aquí te dejamos cinco tips que seguramente te ayudarán en tu siguiente día de lavado.
NO TARDAR EN SACAR LA ROPA DE LA LAVADORA
Lo primero que debes de saber es que tienes que evitar la humedad. ¿Cómo?, tendiéndola rápidamente, es decir, sacar la ropa de la lavadora tan pronto concluya el ciclo; en caso de que se te olvide, lo ideal será volver a darle un programa corto y evitar así los malos olores.
CHORRO DE VINAGRE A TU SUAVIZANTE
Además de la típica clasificación de blanco y color, también puedes apartar las toallas o la ropa verdaderamente sucia. Si el olor a humedad es persistente, te sugerimos que junto con el suavizante añadas un chorro de vinagre blanco, seguro te ayudará.
ESPACIOS PROTEGIDOS DE LA LLUVIA
Lo ideal es tender la ropa en un lugar abierto, protegido de la lluvia y con mucho espacio para que todo esté muy estirado, esto permitirá la ventilación perfecta para que la ropa se seque bien y aparte de que no se te arrugue.
- Te sugerimos: De barrendero a dueño de una de las empresas más importantes de productos enlatados en México
TENDER EN INTERIORES
Si en tu casa no cuentas con alguno de los requisitos anteriores, te sugerimos adquirir tendederos plegables que puedes poner tanto en exterior como en interior. La ventaja de este tipo de tendederos especiales, es que ocupan poco espacio y puedes guardarlos detrás de una puerta o junto a la lavadora.
TENDEDEROS ELÉCTRICOS
Finalmente, existen también tendederos eléctricos que presentan la misma forma que un tendedero de alas tradicional, pero con la ventaja de que desprende calor para ayudar a secar la ropa rápidamente. Los puedes adquirir en cualquier tienda de muebles o por medio de internet, a diferentes precios según la potencia o el tamaño.
