Dentro de México una nueva variante de la Covid-19 sumó sus primeros casos al tratarse de la XBB, mejor conocida como la variante “Pesadilla”.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Medicina Genómica (INMEGEN) se confirmaron los primeros cuatro casos de esta subvariante de Ómicron, por lo que las personas con el contagio se encuentran bajo investigación para conocer cómo se desarrollan los síntomas y la enfermedad.
Su sobrenombre de “pesadilla” fue otorgado por la prensa y las personas en Singapur, después de que se convirtiera en la subvariante que provocó la última ola de contagios dentro del país asiático.
¿Qué se sabe de los casos?
En su reporte el INMEGEN explicó que uno de los casos se identificó el 10 de noviembre, mientras que los otros tres en pruebas de laboratorio realizadas el 16 de noviembre. Después de identificarse la variante, las muestras fueron analizadas por el INMEGEN y se comprobó que se trataba de XBB.
El primer caso sería un hombre de 32 años, quien se encuentra bajo vigilancia y es originario del Estado de México. Los tres restantes corresponden a mujeres de distintas edades, una niña de 12 años, una mujer de 32 años, ambas también del Estado de México y una mujer de 65 años, la única del grupo que estaría vacunada.
Las cuatro personas se mantienen bajo observación con la intención de que se pueda identificar cómo esta nueva variante puede interactuar con las personas vacunadas y con aquellas que han generado inmunidad por casos anteriores.
Durante su conferencia de prensa del pasado 29 de noviembre, Hugo López Gatell, subsecretario de prevención y promoción de la Salud, explicó que en la última semana se identificó un incremento en los casos, con el 4 por ciento de las hospitalizaciones correspondientes a camas generales y solo el 1 por ciento a camas con ventilador, de forma que los pacientes ya no son críticamente enfermos.
¿Qué se sabe de la variante XBB?
La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó por primera vez de la subvariante XBB conocida como “pesadilla” y de la subvariante BQ.1 nombrada como “perro del infierno” en una declaración realizada el pasado 27 de octubre.
En ese momento señaló que el Grupo Asesor Técnico de la OMS sobre Evolución del Virus SARS-CoV-2 (TAG-VE por sus siglas en inglés) indicó que los dos son sublinajes de Ómicron y que en una primera revisión no había mucha diferencia entre sí o con otros linajes de Ómicron con mutaciones de escape inmunitario adicionales.
En aquel momento señalaron que XBB era un recombinante de los sublinajes BA.2.10.1 y BA.2.75. Para la semana epidemiológica 40, es decir del 3 al 9 de octubre, ya se había detectado en 35 países y tenía una prevalencia global de 1.3 por ciento.
Se detectó primero en países de Asia como Singapur e India, en donde se le comenzó a llamar como “pesadilla” por el aumento de contagios que provocó. Por ejemplo, en Singapur a mediados de noviembre XBB ya representaba más de 80 por ciento de los casos de la Covid-19, esto al tener una mayor resistencia a las vacunas y los anticuerpos monoclonales.
También se ha detectado en países como Estados Unidos, en donde compite con la variante BQ.1 o “perro del infierno” como las variantes que mayor cantidad de contagios representa.
La variante “pesadilla” o XBB de la Covid-19 puede llegar a provocar síntomas como dolor de garganta, dolor de cabeza, fatiga, malestar corporal, estornudos, fiebre, fluido nasal, entre otros.
