El sueño de toda persona es hacerse de un patrimonio, pero cuando se trata de una persona de escasos recursos o incluso en situación de calle este sueño suele nublarse, pero esta mujer demostró que todo es posible, luego de que con sólo 24 pesos mexicanos comprara una casa en ruinas y terminara por convertirla en la que fue descrita como una “casa de ensueño”.
Esto le sucedió a Maxine Sharples, una mujer originaria de Liverpool, Reino Unido, quien con sólo una libra esterlina, cuyo valor aproximado es de 24 pesos mexicanos, decidió comprar una vivienda en ruinas, para posteriormente remodelarla a su gusto, logrando un resultado que incluso atrajo las miradas de medios locales que comenzaron a contar la historia de la trasformación de dicha construcción.
DE VIVIR EN UNA COMBI A TENER LA CASA DE SUS SUEÑOS
Todo comenzó en 2015, cuando la joven de 35 años decidió participar en la iniciativa "Homes for a Pound" o en español “Casas por una libra”, que tiene como principal objetivo el volver a darle uso a diversas propiedades que se encuentran vacías y justo cuando la mujer era estudiante de posgrado en la Universidad John Moores.
Fue desde entonces que, pese a que no le invirtió gran cantidad de dinero, si le tomó algunos años y esfuerzo el poder hacer de esta propiedad un lugar habitable, tiempo en el que la también profesora de yoga tuvo que vivir a bordo de una combi, pero tal fue la magnitud de las obras que en 2019 el programa “Liverpool Echo” la buscó para una entrevista.
EL SALTO A LA FAMA DE MAXINE SHARPLES
Fue cuatro años después de concretar su sueño de tener una casa que miembros del programa “Liverpool Echo” se dieron a la tarea de buscar a Maxine Sharples, pues prácticamente levantó la que ahora era su vivienda desde cero, por lo que incluso tras el cambio en su vivienda le reiteraron la pregunta sobre “si todavía estaba interesada en una casa por una libra",
Cabe señalar que sólo contaba con un año para poder completar las renovaciones en su vivienda, pero “por fortuna” se atravesó en su camino la pandemia de la Covid-19 y pudo dedicarle 27 meses a los trabajos de remodelación, por lo que el proceso la agotó ya que la mujer subestimó lo complicado que sería el proceso de remodelación debido a una escasez de trabajadores y comercios para la compra de materiales.
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La propia Maxine fue quien realizó los trabajos sólo pidiendo prestada electricidad a sus vecinos e incluso reveló que del total de 60 mil libras esterlinas con los que contaba para renovar la vivienda, destinó 56 mil que dieron pie a una casa estilo victoriano convertida en un apacible e iluminado hogar que la hizo sentirse “en casa”.
