Pasividad para gestionar los recursos económicos y continuar con el proceso de la restauración en el Exconvento franciscano de Huaquechula fue parte de lo que señaló Silverio Reyes Sarmiento, presidente de la Asociación Civil Cultura Huaquechula y secretario de la Junta Eclesiástica del Templo Conventual, quien aseguró que, de no atenderse esta situación de manera inmediata, el monumento que data de más de 400 años de historia, podría desencadenar en un desplome.
Reyes Sarmiento destacó que si bien, muchas actividades se han detenido ante la contingencia sanitaria, la suspensión de las acciones de restauración se dio antes de que esta se presentara.
“Entendemos el tema de la contingencia a nivel mundial, pero la separación de los trabajos no se derivó por esta contingencia, fue previo. Esperamos que pasando la contingencia tener una reunión con Diego Prieto, director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), o con la coordinadora nacional de sitios y monumentos para presionar y que se dé continuidad a los trabajos de Huaquechula”, sentenció.
Destacó que la preocupación existente es que ya suspendieron los trabajos estructurales, no han terminado el apuntalamiento al ciento por ciento y las calas arqueológicas están a la vista, lo que pone en riesgo las estructuras.
“Al no tener las inyecciones suficientes para rehabilitar y disminuir el daño estructural, al no tener terminado el apuntamiento y estar volando prácticamente el edificio, aunado al incremento de actividad volcánica, esto provoca que el edificio sea más vulnerable, y sí, corre el riesgo de un desplome mayor”, aseguró.
Recordó que, en septiembre de 2017, cuando sucedió el sismo, llegaron expertos y empresas a la zona que querían intervenir para la restauración, no obstante, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) del estado y nacional no llegaron a acuerdos al asegurar que ellos contaban con los medios para hacer frente a la restauración.
“Lamento decirlo así, pero, siempre decía la gente del INAH: no se preocupen, el exconvento tiene papá, mamá, tío, tía, abuelita, hasta perrito; en referencia que había mucha gente interesada en el rescate y aportaciones que estaban dispuestos a dar, pero nunca vimos una respuesta concreta”.
PIERDEN APOYO DE FUNDACIÓN
Silverio Reyes lamentó que a pesar de que la Fundación Alfredo Harp Helú se ofreció para dar apoyo para la reconstrucción y agilizar el proceso, este se perdió derivado que el INAH aseguró que ellos tenían la capacidad para resolver la situación, hecho que quedó plasmado en una carta que Isabel Grañén Porrúa envió al director General del Instituto Nacional de Antropología e Historia, Diego Prieto Hernández.
“También quedó clarísimo y nunca lo hemos puesto en duda que el INAH tiene la capacidad para resolver los problemas que enfrenta el templo de Huaquechula y que cuentan con un equipo eficiente para ello (…) En una profunda reflexión la Fundación Alfredo Harap Helú hace de su conocimiento que se retira de la responsabilidad de la ejecución y administración de la obra”, se lee en la carta.
Recientemente, mediante su cuenta de Twitter, Diego Prieto, reconoció que existen problemas para continuar con el proceso y se comprometió a retomar los trabajos de reconstrucción.
“Si existen problemas, pero debemos atenderlos, para retomar los trabajos. En eso estamos y no nos vamos a detener. La restauración supone estudios y análisis cuidados, para definir la estrategia de intervención, pues el daño fue masivo y severo. Tienen mucha razón al preocuparse”, se lee en su cuenta.
Finalmente, Silverio Reyes Sarmiento, compartió que cuando sucedió el sismo, personal del INAH les hizo saber que la restauración duraría aproximadamente 3 años y a la fecha, se ve que va a prolongarse durante otro par de años, esto, derivado de una pasividad para gestionar los recursos, por lo que el exhorto que hizo es que le den agilidad al proceso para que 400 años de historia no queden en el olvido o peor aún, que cualquier momento se pueda perder.
“A nosotros sí nos interesa recuperar el patrimonio cultural histórico de Huaquechula, es un templo que estuvo más de 400 años en culto, es un templo que es el corazón de la comunidad en actividad turística y religiosa, y a nosotros como ciudadanos sí nos interesa rescatarlo”, sentenció.
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