Como “un asunto cultural muy complicado”, calificó el gobernador del estado de Puebla, Luis Miguel Barbosa Huerta, la suspensión de actos litúrgicos para la celebración de la Virgen de Guadalupe. No obstante, informó que en esas fechas encabezarán operativos para cuidar a los peregrinos.
En su conferencia matutina, el mandatario dijo lo decretado por la Arquidiócesis debe ser respetado, aunque la iglesia no tenga jurisdicción. Sin embargo, anunció que su administración estará lista con patrullas para brindar seguridad en las carreteras a los poblanos que decidan hacer peregrinaje tanto el 11 como el 12 de diciembre.
“Hay que acompañar con nuestra opinión, sólo con eso, porque son dos cosas distintas el mundo de la autoridad y el mundo eclesiástico. Va a ser complicado que no se pronuncien por su adorada virgencita de Guadalupe y que los festejos grandes se vuelvan chicos y que se vuelvan más controlados. No sé cómo vaya a ser el tema de impedir las peregrinaciones. Nosotros estaremos listos como estuvimos el año pasado con todas nuestras patrullas, de cuidar en las carreteras a nuestros poblanos que caminan rumbo al santuario”, comentó.
En su opinión, el número de peregrinos va a ser menor en comparación con el año pasado principalmente por la contingencia sanitaria a raíz del coronavirus, pero no cree que desaparezcan este tipo de movilizaciones, por tanto, seguirá la seguridad en las vialidades.
“Vamos a estar listos nosotros para apoyar a nuestros poblanos o a cualquier caminante que venga de Veracruz o Oaxaca, los tomemos desde que entran a territorio poblano y los dejamos cuando cruzan la caseta de Chalco, allá los dejamos, pero hay que apoyar las decisiones de la Iglesia como autoridad civil”, concluyó.
Fue este 20 de octubre que el rector de la Basílica de Guadalupe, Salvador Martínez, anunció que han sido canceladas todas las celebraciones que se realizan a la virgen, tanto el 11 como el 12 de diciembre para evitar concentraciones masivas y contagios de coronavirus.