La Casa del Adolescente, situada en el municipio de Cuautlancingo, es un lugar digno que apoya a jóvenes en condición de vulnerabilidad, donde tienen garantizado un techo, alimentos, atención médica y espacios educativos.
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Fue en agosto del año pasado, cuando autoridades estatales, con una inversión de 28.7 millones iniciaron la construcción de este espacio, que ahora es una realidad y tiene espacio para albergar a 80 adolescentes, que están bajo la custodia del Sistema Estatal DIF.
Con un diseño arquitectónico de vanguardia, la nueva instalación sustituye la anterior sede, que operaba en San Andrés Cholula. La Casa del Adolescente cuenta con un área de dormitorios para mujeres y hombres, módulos sanitarios, una zona de guardarropa, enfermería y atención médica, así como cocina y comedor.
Otros servicios en apoyo de los jóvenes son un almacén, lavandería y una cancha de usos múltiples.
Las instalaciones también tienen un pabellón que alberga el área administrativa y de consultorios médicos, de psicología, nutrición y trabajo social, así como oficinas de acompañamiento legal y tutoría.
Para fomentar la sana diversión de los jóvenes, destaca un salón de usos múltiples y de talleres, que tienen como objetivo descubrir los talentos de quienes habitan en este lugar, que da cobijo a adolescentes de 13 años a 17 años con 11 meses de edad.
Otro apoyo que otorga este inmueble, son espacios educativos para tomar clases de nivel secundaria, bachillerato y educación para adultos.
Es importante decir, que también la Casa del Adolescente cuenta con un área de transición con ocho departamentos para dar techo a jóvenes que ya tienen la mayoría de edad, pero al carecer de una red de apoyo, pueden quedarse por medio año más, mientras encuentran estabilidad en la sociedad o una oportunidad laboral.
