Desde el 2015 y hasta septiembre de este año, el delito de hostigamiento sexual ha derivado en 342 investigaciones en el estado de Puebla, siendo la capital poblana el municipio con más incidencia por este delito. Es decir, que durante estos años se han registrado varios casos de personas que asedian con naturaleza sexual.
De acuerdo con la página oficial del Congreso del Estado de Puebla, el hostigamiento sexual es cuando se asedia a otra persona, emitiéndole propuesta o utilizando lenguaje lascivo con el fin de ejecutar cualquier acto de naturaleza sexual. Además, al responsable de dicho delito se le puede castigar gracias al Artículo 278 Quáter.
El artículo dice lo siguiente: “Al responsable del delito de hostigamiento sexual se le impondrán de 6 meses a 2 años de prisión y multa de 50 a 300 días de salario y será punible cuando se ocasione un daño o perjuicio en la posición laboral, docente, doméstica o de cualquier naturaleza que se derive de la subordinación de la persona agredida”.
Puntualmente en el estado de Puebla, desde el año 2015 y hasta septiembre de este año, se han abierto un total de 342 carpetas de investigación por hostigamiento sexual, sin embargo, el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública no indica el sexo de las víctimas ni de los victimarios y la relación que sostenían.
En esto último se puntualiza ya que en la mayoría de los casos el que ejerce este tipo de violencia es una persona que tiene mayor jerarquía laboral o estudiantil. Incluso el mismo Congreso de Puebla en sus artículos para sancionar este delito dice:
“Es el ejercicio del poder, en una relación de subordinación real de la víctima frente al agresor en los ámbitos laboral y/o escolar. Se expresa en conductas verbales, físicas o ambas, relacionadas con la sexualidad de connotación lasciva. A diferencia del acoso sexual, el hostigamiento sexual tiene la particularidad de que la persona activa es de mayor jerarquía laboral que la víctima y valiéndose de esa posición de poder, la asedia sexualmente”.
Hay que mencionar que el año con más indagatorias por este delito desde que se tiene registro es el 2019, pero su desarrollo por año se presentará a continuación: el 2015 cerró con 35 carpetas, el 2016 bajó la cifra con 24 y para el 2017 nuevamente hubo una baja con 18 investigaciones.
El 2018 concluyó con 32 carpetas y el 2019 se disparó con 65 casos, convirtiéndolo en el año con más hechos de este tipo, para el 2020 que fue el primer año pandémico se contabilizaron 63 carpetas, el 2021 55 y hasta septiembre de este año van 50, lo que significa que este 2022 no ha terminado, pero ya superó las cifras totales de 2015 hasta 2018.
Este 2022 las carpetas de investigación se ubicaron en Puebla capital, Huejotzingo, Huehuetlán el Chico, Cuautlancingo, Amozoc, Teziutlán, Tochimilco, Zacatlán, Atlixco, Hueytamalco, Tehuacán, Tlapanalá, Tecali, Tecamachalco, Ahuacatlán, San Martín Texmelucan, Chignahuapan, San Pedro Cholula y Santiago Miahuatlán.
Los municipios con más incidencia este año han sido Puebla, pues hasta el momento lleva 17 carpetas de investigación y Huejotzingo con 10 indagatorias.
