Damnificados que dejó la Tormenta Tropical Earl hace cuatro años, se quejaron de los cobros de las viviendas que aún les está haciendo el ex presidente auxiliar de Xaltepec, Norberto Gómez, quien pretende que le paguen la cantidad de 25 mil pesos por cada una. Algunos ya le pagaron.
Son siete viviendas que fueron construidas en el terreno denominado Naranjaxtitla, de las que sólo están habitadas tres. El resto están abandonadas, debido a que no tienen servicios básicos de urbanización.
Los inmuebles fueron construidos tras el paso de la Tormenta Tropical Earl, ocurrido el 6 de agosto de 2016, sin embargo, el ex presidente auxiliar, Norberto Gómez, de manera periódica les recuerda a quienes habitan las casas que, el gobierno construyó las viviendas, pero que el terreno es de su propiedad, predio que –asegura- no le fue pagado.
Las viviendas de menos de 45 metros cuadrados de construcción, tienen dos recámaras, una pequeña sala comedor, un baño, sin agua y sin drenaje, tampoco tienen una calle para acceder, sólo una servidumbre de paso que no está pavimentada y la energía eléctrica fue gestión de los damnificados.
En una de las viviendas habitan cinco personas y en la otra, siete integrantes de la familia, quienes tienen que acarrear el agua para su consumo a unos 200 metros de distancia, donde se encuentra un manantial.
Debido a los cobros que el expresidente auxiliar estuvo haciendo, una mujer, madre de familia “le dijo al presiente que fue en el periodo pasado que no tenía, sólo le había dado 7 mil pesos, pues después se enteró la mujer que Norberto Gómez ya estaba buscando cliente para la casa, por lo que ella se apresuró, encontró a quién traspasarle la vivienda y así le dio los 25 mil pesos, para evitar que el expresidente auxiliar hiciera negocio”, compartieron los vecinos.
El jefe una de familia, Enrique N., dijo ya haber pagado el total de la vivienda, mientras que Virginia N, aseguró que sólo lleva 7 mil pesos entregados a Norberto Gómez, sólo que ya es “mucha insistencia la del expresidente. Le debía 21 mil pesos, pero como no he podido pagarle, ya me la subió a 25 mil”, dijo la víctima del fenómeno meteorológico Earl.
PROMESAS SIN CUMPLIR
Otras 20 familias damnificadas que serían beneficiadas con una vivienda de parte de la Fundación Empresarios por Puebla, siguen esperando su casa. En el terreno donde les dijeron que se construirían una pequeña colonia que llevaría el nombre de Amy Camacho, pero quedaron solamente las bardas.
Es un terreno de casi 2 mil metros cuadrados, está ubicado en la Junta Auxiliar de Xaltepec, en donde la Tormenta Tropical Earl, dejó al menos 28 personas muertas, cuatro desaparecidos y un sinnúmero de damnificados que lo perdieron todo.
En el predio solamente se ven hechos terraplenes, está en una larga ladera, cerca del Barrio Xaltepec, en el que se construyeron muros de contención y escalones para subir de un nivel a otro. No hay más.
El pasado 15 de junio del año 2018, es decir, a dos años de la tragedia, el presidente de la Fundación Empresarios por Puebla, de nombre Herberto Rodríguez Regordosa, fue recibido con música de banda, con comida de parte de los comuneros de Xaltepec y el entonces presidente municipal, Gabriel Alvarado Lorenzo, de extracción morenovallista.
El empresario dijo que, en honor a la ambientalista y ex secretaria de Sustentabilidad Ambiental y Ordenamiento Territorial durante el gobierno de Rafael Moreno Valle, Amy Camacho (recientemente fallecida), la pequeña colonia de 20 viviendas llevaría su nombre.
Explicó que el proyecto constaría de una inversión de 5 millones de pesos, de los que, la mitad serían aportados por la Fundación en cuestión y el resto, entre el Ayuntamiento de Huauchinango y el gobierno federal, mediante subsidios a la vivienda. La comuna aportaría un millón de pesos en servicios básicos como, agua potable, drenaje, electrificación, pavimentación de los accesos.
Incluso, Rodríguez Regordosa aseguró que la fundación había llegado para quedarse en Xaltepec, porque se encargaría de desarrollar proyectos de remediación ambiental, como reforestación, que, ayudarían a restablecer las condiciones para evitar más desastres por deforestación.
A cuatro años del paso de Earl y a dos años del anuncio de la construcción de las viviendas, a la Fundación Empresarios por Puebla no se le ha vuelto a ver realizando trabajos y los damnificados siguen esperando su vivienda.