El grupo "Caballeros Águila" de voladores de Cuetzalan se presentó en la visión 74 del festival "Mandorlo in Fiore", celebrado del 1 al 10 de marzo en Agrigento (Italia) como parte de la promoción y realce a las expresiones artísticas autóctonas que han sido declaradas como Patrimonio Inmaterial de la humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
Aunque participan grupos populares de todo el mundo, en este festival se presentan sus mejores tradiciones ancestrales; la prensa italiana exaltó del trabajo de los voladores de Cuetzalan en la edición 2019, donde fueron los protagonistas.
El evento destaca por ser la primera vez que una tradición ancestral mexicana se presenta en Italia, en el llamado "Valle de los templos", zona arqueológica de Sicilia que conserva Templo dórico del periodo helénico, declarado patrimonio de la humanidad de 1997 y donde, cada año, se muestra el mundo vestido de blanco, al igual que el color de los almendros a que se refiere el título de festival.
La participación de los llamados "voladores", de la tradición totonaca fue en 2009, cuando participaron los "Voladores de Papantla (Veracruz)" que se incluyó la lista de sitios del patrimonio mundial de la Unesco. En esta ocasión, los voladores de Cuetzalan fueron reconocidos con uno de los representantes de esta tradición por sus peculiaridad y misticismo en la danza aérea milenaria que interpretan.
El grupo de voladores está compuesto de cinco hombres y una mujer que escalaron un poste de 30 metros, que se aseguran con cuerdas a los pies y lanzan el vuelo, mientras el quinto permanece en la parte superior bailando y tocando una flauta y un tambor.
Es una ceremonia con toques de flautas antiguas y particulares centro de México que se extiende a varias zonas mesoamericanas; este viaje por los aires es una forma en que los hombres voladores invocan a los dioses pidiendo un favor en beneficio de los cultivos, refuerza el sentido de pertenencia social y cultural de sus intérpretes, así como de las comunidades de donde se desprenden.
Los medios italianos destacaron que no se trata de un juego o ejercicio de equilibrio, sino un antiguo ritual con significados místicos que la Unesco incluyó como patrimonio inmaterial de la humanidad desde 2009.
Te presentamos el ritual con el que los pobladores de Cuetzalan cultivan sus tradiciones en torno a la danza de los voladores