“No te vayas así vestida”, “date a respetar”, “el hombre llega hasta donde la mujer quiere”, “con ese carácter nadie te va a querer”, estas son algunas frases machistas que se siguen escuchando en la actualidad y que la activista Olimpia Coral cree que se deben de eliminar del vocabulario de las mujeres, ya que el machismo asesina cada 2 horas a una mujer en el país.
La activista poblana, puntualmente originaria de Huauchinango, se presentó en el municipio de San Pedro Cholula en un evento organizado por la diputada local, Tonantzin Fernández. En esta demarcación, ofreció una charla de machismo y la Ley Olimpia en el marco del Día Internacional de la Mujer.
Olimpia comenzó la charla haciendo preguntas a las mujeres cholultecas, por ejemplo, si alguna vez habían sido acosadas, si tenían que cambiar sus rutas por miedo a ser vulneradas por un hombre, o si en algún momento un hombre las hizo sentir menos por el simple hecho de ser del sexo femenino y la mayoría levantó la mano cuando tenían que decir que responder que sí.
Olimpia dijo que últimamente en Puebla ha escuchado que dicen: “Ni feminismo, ni machismo, sólo humanismo”, pero cree que esta frase es errónea, pues las mujeres son las principales víctimas de la desigualdad, la violencia, el acoso, el hostigamiento y por supuesto de los homicidios, que, si son de mujeres, en su mayoría son feminicidios.
La feminista les preguntó a las mujeres presentes a qué edad tuvieron su primer acoso, y coincidieron que las primeras agresiones (físicas, verbales, etc), fueron desde los seis años en adelante. En este punto dijo que, si alguna mujer no había sido violentada en toda su vida que era una persona privilegiada, ya que de alguna u otra forma, las mexicanas y las poblanas, han sido vulneradas en menor o mayor grado.
También lamentó que muchas de las mujeres sean calladas cuando denuncian alguna agresión, pues “lamentablemente” las mujeres fueron educadas para ser sumisas y para estar debajo de un hombre. Por tanto, Olimpia cree que esa situación debe de cambiar para ofrecerla a las niñas, así como adolescentes un mejor futuro.
“Aunque la violencia le pasa a hombres y mujeres, no nos pasa de la misma forma (…) fuimos educadas para servir y dar, a ser dadoras, y si yo les pregunto a la mayoría que están aquí cuál es su sueño, la gran mayoría me van a decir sueños para su familia, que mi hijo pueda estudiar, que mi esposo pueda comprar su terreno, pero no son sueños suyos, pero si les pregunto a los hombres, inmediatamente van a decir que quieren un coche, que quieren una casa, eso es patriarcado”, comentó.
Desde su óptica, las mujeres siguen con un papel de sumisión y los roles de una sociedad patriarcal, por lo que las invitó a seguir informándose, empoderándose, alzando la voz, denunciando, y también dejar esa rivalidad histórica que hay entre mujeres, pues, de igual modo, esa competencia beneficia al machismo.
“Seguimos escuchando frases que el hombre llega hasta que la mujer quiere, que no nos vistamos de tal manera, pero a que hombre le han pedido lo mismo (…) si cambios al protagonista la violencia indigna, ya lo entendemos y decimos ay cabrón, sí es cierto, señoras, eso es el patriarcado”, agregó.
En el evento hubo hombres, a quienes Olimpia invitó a la reflexión para cambiar conductas misóginas, pero también a ser aliados de sus parejas. Debido a que Olimpia fue invitada por la diputada local, dejó en claro que es apartidista, pero que, si la invitan a hablar de temas de feminismo, siempre acudirá, pues considera que mientras más mujeres sepan de temas de género, será una mejor sociedad.
Olimpia Coral es una mujer que ha recorrido todo el país para promover la Ley Olimpia, la cual busca tipificar y sancionar el acoso, hostigamiento y difusión de contenido sexual en plataformas de internet o redes sociales. Fue la difusión de su video íntimo y estar al borde del suicidio lo que la motivó a ser activista, pues en algún momento de la crisis se detuvo y pensó que era momento de luchar. En 2013, el video que grabó junto con su pareja fue filtrado, primero a través de WhatsApp, Facebook y después en páginas de pornografía en internet, que la marcaron en ese momento como “la gordibuena de Huauchinango”.
