IZÚCAR DE MATAMOROS, Pue. En sedes alternas se realizan lasmisas de las parroquias de Santiago Apóstol y de Santa María LaAsunción; mientras que en la iglesia de Rijo, en el municipio deTilapa, debido a que no presentaba severos daños, esta actividadse realiza al interior de la misma.
Las misas mañaneras que se realizaban en la parroquia de SantaMaría La Asunción, ubicada en plaza principal al igual de La Luz,fueron suspendidas por indicación de Protección Civil del estadode Puebla además del Instituto Nacional de Antropología eHistoria (INAH), después del terremoto del día 19 deseptiembre.
En el caso de Santa María La Asunción, algunas misas, porejemplo la dedicada a San Judas Tadeo, a finales del mes octubre,se realizó frente al inmueble, donde se colocó una enorme lona yfue oficiada la misa, prácticamente a la intemperie dondeacudieron los feligreses.
También fueron habilitados algunos horarios en iglesias olugares particulares como viviendas en diferentes puntos de la zonaurbana de Izúcar de Matamoros, para realizar misas, pero elobjetivo es crear sensibilidad en el mensaje que se deja a cada unode los asistentes para que lo promuevan en la comunidad cristiana,dijo Ariel, uno de los predicadores.
Sin embargo, en la parroquia de Santiago Apóstol, la cualpermanece cerrada y considerada como una de las más afectadas, lashomilías se realizan en un salón ubicado de manera alterna aledificio principal, donde los fieles católicos y creyentes de“Santiaguito”, acuden a escuchar misa en horario nocturno.
Santo Domingo de Guzmán, cuya parroquia salió también dañaday que permanece cerrada al público, las misas han sido suspendidashasta nuevo aviso situación similar ocurre en edificio como losubicados en cabeceras municipales de Tilapa, Chietla, Tepexco juntocon algunas de sus comunidades.
Pero una de las pocas iglesias, establecida en la comunidad deRijo, cercana a la cabecera municipal de Tilapa, las misas fueronreactivadas desde finales del mes de octubre debido a que losdaños no fueron considerados como graves ni tampoco ponen enriesgo a los feligreses.