El estado de Puebla no tiene condiciones económicas para construir nuevos reclusorios, así lo confirmó el gobernador, Luis Miguel Barbosa Huerta, quien aprovechó para mencionar que no endeudará a la entidad por edificar una de estas cárceles.
Aunque en su campaña, el ahora mandatario, se comprometió a construir un Centro de Readaptación Social (Cereso) en cada uno de los 22 distritos judiciales en Puebla; hoy dijo, que el Gobierno del Estado no tiene condiciones económicas para lo anterior; Barbosa Huerta no detalló el motivo de la condición económica y no especificó si fue resultado de la crisis por el Covid-19.
“Ojalá y tuviéramos muchos más recursos porque no se trata de prever una partida (…) nosotros no tenemos más que la suma de lo que nos envía la federación y nuestros ingresos propios y de ahí tenemos que derivar todo un esquema de apoyo, de respaldo o de garantizar las actividades gubernamentales”, declaró en su conferencia matutina.
El pasado octubre, el gobernador informó que el Centro de Reinserción Social (Cereso) ubicado en el municipio de San Pedro Cholula se edificaría con recursos de las carreteras concesionadas en el estado y otra cantidad la pagaría el Gobierno Estatal. Sin embargo, para este lunes confirmó que, por lo menos para estas fechas, esto es inviable.
“Necesitamos miles de millones cada reclusorio puede costar mil 500 millones de pesos y estamos entre buscar el terreno, que hoy nadie quiere dar terrenos, todo quiere que sean con pago y sí tienen razón. Nos vienen a decir los presidentes municipales: aquí hay un terrenito, pero cuesta a tanto el metro. Tenemos que reponer el reclusorio de Cholula, sustituir el reclusorio de Tehuacán y hacer un reclusorio de por lo menos 2 mil Personas Privadas de la Libertad (PPL) para aligerar la presión en San Miguel”, concluyó.