Habitantes de La Resurrección que participaron en la manifestación con violencia del pasado martes frente a Palacio Municipal aseguraron que tras la detención de tres de sus vecinos, entre ellos el edil auxiliar Adolfo Reyes Pérez, ya no desean seguir perteneciendo a la capital poblana, de tal forma que pedirán a la autoridad estatal y al Congreso que considere convertirlos en un nuevo municipio.
En conferencia de prensa, Máximo Cuatlaxahue Santabarbara, quien se identificó como representante del Consejo Indígena de La Resurrección, afirmó que el diálogo con la autoridad municipal ya es imposible porque no existe disposición para que sean respetados sus usos y costumbres.
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Insistió en que la comunidad solicita que el cobro de los impuestos y lo relacionado a la regulación comercial quede en manos de la autoridad auxiliar porque deben ser tratados como población indígena, a pesar de que estas son atribuciones del Ayuntamiento.
Cuatlaxahue, quien estuvo en la protesta del pasado martes, dijo que no consiguieron llegar a algún acuerdo o solución con la Secretaría de Gobernación Municipal respecto a la gobernanza en la junta auxiliar, motivo por el que ya recurrieron a solicitar el apoyo del gobierno estatal para tal fin.
Agregó que, tras los hechos en los que fueron detenidas tres personas y el tractor que llevaban quedó puesto a disposición de la autoridad ministerial, realizaron una asamblea y la mayoría de los asistentes se pronunció a favor de dejar de pertenecer al municipio de Puebla, motivo por el que comenzarán a realizar los trámites en este sentido.
No hay acuerdos especiales con La Resurrección: Segob
El Secretario de Gobernación municipal, Jorge Cruz Lepe, negó que exista algún acuerdo o reglamento que obligue a la autoridad municipal a delegar funciones de regulación comercial al edil de La Resurrección, como piden los inconformes.
“Nosotros respetamos sus usos y costumbres, ellos controlan el agua, ellos controlan otras cosas, pero no entrar a un antro con ciertas características, si no entra el gobierno municipal a tratar que estos sitios no perjudiquen a la juventud de esos pueblos, pues ellos no están facultados para hacerlo”, expresó.
A la par, coincidió con los señalamientos del presidente municipal, Eduardo Rivera Pérez, en el sentido de que existe manipulación en el tema, ya que los inconformes argumentaron que su protesta ocurrió debido al cierre de negocios que incumplían con la normativa, pero el dueño del bar que fue clausurado en esa junta auxiliar está dispuesto a cumplir con sus obligaciones.
Lepe afirmó que tras la clausura del lugar, habló directamente con el presidente auxiliar y le dijo que no estaba facultado para cobrar licencias de funcionamiento, ya que el propietario del negocio expresó que estaba dispuesto a regularizarse con el ayuntamiento pero el subalterno había quitado los sellos de clausura del local.
“El dueño de este lugar fue y pagó, llevó los sellos de clausura e inclusive comentó que el mismo presidente auxiliar los había arrancado, así que ellos están conscientes de sus obligaciones, esto se empieza a convertir en un juego maquiavélico, primero en lo económico y luego en lo político”, acentuó.
Para finalizar, sentenció que el gobierno municipal no va a ceder a la petición de “hacerse de la vista gorda” en el funcionamiento irregular de establecimientos con venta de alcohol y va a seguir ejerciendo sus facultades de regulación.
