“Llovió con ganas, como si Dios estuviera enojado con nosotros”, así fue como describieron el aguacero del pasado fin de semana los vecinos del Infonavit San Jorge, la mayoría de las casas que se encuentran en el primer piso se inundaron y los que están en el segundo, tuvieron que tapar sus baños para que el agua no se saliera de los inodoros.
Este medio acudió al conjunto de casas que están ubicadas en el sur de la Ciudad y los vecinos están preocupados, ya que en esta temporada de lluvias las inundaciones se están haciendo muy frecuentes. Han pedido apoyo de Protección Civil y de bomberos, pero el personal sólo los ayuda a sacar el agua de sus hogares y a limpiar las alcantarillas, pero cuando vuelve a llover, nuevamente tienen el mismo problema.
Los vecinos argumentan que todo comenzó en el 2013, cuando empezaron a pavimentar algunas calles que rodean el conjunto habitacional, explicaron que había varias alcantarillas, pero al cubrir el suelo con asfalto, bloquearon muchos de estos acueductos. Esto poco a poco dio como resultado que el agua se encharcara y hoy en día, se pueden ver las casas, así como la calle de la 14 sur inundadas, sin que nadie haga algo al respecto.
Erika Palacios tiene una tienda en San Jorge, su negocio y su casa (que está en el primer nivel) resultaron afectados, el agua les llegó hasta las rodillas y tuvieron que agilizarse para levantar todo y que sus cosas no se mojaran. De igual modo, la señora Angélica Cruz, se durmió hasta la madrugada por estar sacando a cubetadas el agua y está preocupada, porque cuando llueve esta zona “parece un río”.
Ivonne Sánchez es una madre soltera que también vive en este lugar, este fin de semana se le hizo eterno, ya que tenía que cuidar a sus niños, que el agua no entrara y además tenía que tomar fotografías, así como vídeos, ya que cuando ha intentado levantar un reporte en Agua de Puebla Para Todos, le han mencionado que sólo pueden acudir si hay pruebas.
Olivia Carrasco no se libró, aunque ella vive en el segundo piso, cada vez que llueve, se sale el agua de sus inodoros y desconoce cual sea la razón y aseguró que no es a la única persona que le pasa esto.
Mientras que al señor Rodrigo Martínez y su esposa Julieta García, es la tercera ocasión en este año que se les inunda su tienda y aunque han levantado el reporte en la empresa antes mencionada, les dicen que pueden ir “sólo a inspeccionar”, pero no les dan una solución.
Su hija, Cinthya Roxana, levantó un reporte el pasado jueves cuando registraron una inundación y les dijeron que podían ir a visitarlos en 3 o 4 días, llegó el domingo y fue cuando la inundación fue más severa, algunos de sus productos se mojaron y su cisterna se llenó de agua sucia.
Para el señor Miguel Ángel Hernández, la noche del 2 de agosto fue una pesadilla, él está enfermo y no puede cargar mucho peso y su esposa tiene cáncer; al ver que su casa se estaba inundando tuvieron que llamarles a sus hijos para que los ayudaran a sacar el agua y aunque lo lograron, la mayoría de sus muebles se mojaron. En este mismo caso, ya han solicitado apoyo de Agua de Puebla, pero no han tenido respuesta.
Los colonos consideran que la solución a sus problemas, además de limpiar alcantarillas es mejorar el drenaje, no obstante, también creen que especialistas deben de revisar la zona, para determinar cual es el origen del problema. Solicitan intervención de las autoridades.
Acusan falta de mantenimiento a jardines y alcantarillas en el Centro Histórico
Luego de las fuertes lluvias de este domingo, los comercios se vieron afectados, pues la lluvia y el granizo tomaron por sorpresa a los locatarios del primer cuadro de la ciudad, así como de las viviendas que se encuentran en el Centro Histórico, por lo que los colonos acusan de falta de mantenimiento a jardines y alcantarillas, lo cual ocasiona las inundaciones.
Los colonos relataron a este medio que al percatarse de los estragos, buscaron la manera de evitar que las aguas dañaran sus aparatos eléctricos, tales como refrigeradores, ya que estos son los que permanecen en el suelo.
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Tras la lluvia, el granizo también hizo acto de presencia, el cual alcanzó hasta 20 centímetros de altura en algunos lugares como la 14 oriente, justo a unas cuadras de Casa Aguayo, donde al ser una calle que es de bajada, el agua entró a las casas y a los comercios que se encuentran cerca.
En tanto, Brisia Maldonado, relató que el granizo entró a su negocio, por lo que con escobas tuvieron que sacarlo, ya que venden verduras y esto podría afectar a su mercancía.
Asimismo detalló llovió muy fuerte, pues los maceteros que se encuentran justo a lado de la calle, los cuales miden alrededor de 50 centímetros, tenían hielo alcanzando los 25 centímetros.
Asimismo, don Jesús Pérez Huerta señaló que en su papelería, el agua también entró, sin embargo por “suerte”, no mojó sus productos; no obstante aseveró que esto es debido a que no se ha dado mantenimiento a las jardineras y por lo que al momento me o de llover las hojas caen y si las alcantarillas tampoco están destapadas, genera un colapso que desemboca en inundaciones.
Como él, también está la señora Irma Hernández, habitante de la 6 poniente, quien menciona que cada año en temporada de lluvias se inunda su casa, ya ha pedido apoyo de las autoridades, pero han hecho caso omiso, por lo que ha optado por hacer una barda en la puerta para que al momento de llover, el agua no llegue a su sala o comedor.
“Cada año se inunda, luego pasan los coches y mueven el agua, con eso provocan que llegue a los negocios y casas que se encuentran a las orillas como la mía“, no solo se ven afectados los comercios o viviendas, sino también los estacionamientos como el que se encuentra en el Paseo de San Francisco, pues hasta este día aún había evidencia de los estragos que causó la lluvia de ayer.
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En el lugar se observó agua encharcada y restos de hojas de los árboles aledaños, mismos que han tapado las alcantarillas de toda esa zona.
En ese sentido, el teatro Recek Saade es uno de los lugares que más se vio afectado, ya que el granizo se dispersó por todo el suelo, y debido a que está cerrado por la pandemia, nadie se percató de los daños, solo los vecinos que mencionaron siempre se inunda en estas fechas.
(Con información de Martha Cuaya)
