Para algunas personas, las agresiones que viven por parte de sus parejas no terminan cuando se separan. Por el contrario, se convierten en víctimas de “violencia vicaria”, agresiones perpetrada cuando alguno de los progenitores ataca a una hija o un hijo con el objetivo de causar dolor a la otra parte.
Este 11 de mayo, se conmemora el Día de la lucha contra la Violencia Vicaria, una agresión silenciosa, que no distingue clases sociales, por ello mujeres en Puebla-las principales víctimas-, salieron a exigir al titular de la FGE, Gilberto Higuera Bernal, revisar las carpetas y juzgar con perspectiva de género.
A decir de Luz del Carmen Arredondo Díaz, representante del Frente Nacional contra la Violencia Vicaria Capítulo Puebla, en la entidad hay más de 50 casos de mujeres a las que se les niega convivir con sus hijos, donde las autoridades no hacen nada, pese a que la sustracción de menores es un delito.
La también víctima de violencia señaló que esta manifestación es un parteaguas para que la iniciativa de ley de la violencia vicaria, presente en el Congreso local, se pueda hacer realidad lo más pronto posible.
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No sólo es la aprobación de la ley, sino que las autoridades se pongan las pilas en actualizarse en estos temas, hay leyes a nivel nacional e internacional que nos protegen, pero no se están cumpliendo señaló.
María Fernanda, víctima de Violencia Vicaria
María lleva más dos meses 14 días separada de su hija recién nacida. Cuando nació la menor decidió salirse de la casa de Juan Manuel, su ex pareja, quien la violentaba a lo largo de su relación. Él respondió con la sustracción de la menor y también con amenazas de muerte y de llevarse a la menor fuera del país.
“Me salí de su casa porque me amenazó (su expareja) con que le pondría a mi hija el apellido de sus papás, me la quería arrebatar, yo me salí sin avisarle y me fui a casa de mi madre, después llegó, agredió a mi mamá y mis hermanos y se robó a la niña” contó María sobre la sustracción.
Desde entonces, María vive con la angustia de no saber cómo está su hija y el temor de que Juan cumpla su amenaza.
Las víctimas entregaron un pliego petitorio a representantes de la FGE, y al grito de “¡No están solas!”, fueron respaldadas por integrantes del Colectivo Voz de los Desaparecidos, quienes permanecen afuera del inmueble para exigir diálogo con el fiscal Gilberto Higuera Bernal.
Posteriormente, las mujeres fueron recibidas por las diputada locales, Aurora Sierra y Mónica Rodríguez, quienes impulsa la iniciativa de ley.
“No es solo la ley, también toda la estructura para poder visibilizarla”, dijo la diputada Aurora Sierra.