El gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta, descalificó la decisión del Poder Judicial estatal de reclasificar como delito de estupro, al abuso sexual que un hombre de 48 años cometió contra su hijastra, quien tenía entonces 14 años de edad. “No, señores (...) dan por hecho que son relaciones consentidas (...) Vamos a estar pendientes de todo este relato”, declaró.
En su habitual rueda de prensa este lunes, el mandatario invitó a Miriam Vázquez Vázquez, madre de las tres menores que fueron sustraídas, entre ellas una niña que fue víctima de violación sexual, por Ramón N., expareja de la mujer.
Así, después de pedir a Miriam exponer su historia en un canal público, Barbosa Huerta opinó sobre la decisión de Lucio León Mata, juez de Oralidad Penal y Ejecución de la Región Judicial Norte, con sede en Huauchinango, de permitir la liberación del imputado el pasado jueves. Esta acción ocurrió después de que el togado reclasificó el ilícito, de violación, a estupro.
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“El animal éste tiene 48 años [y] la niña violada tiene hoy 16 años. Los tres años de los que se ha hablado por parte del Poder Judicial, a lo mejor [los] están contando a partir de la edad que tiene hoy la niña”, señaló.
Y agregó: “No, señores del Poder Judicial, es cuando ocurren los hechos y los hechos ocurrieron hace dos años y en ese tiempo tenía 14 años (...) Dan por hecho que son relaciones consentidas. ¿Son relaciones consentidas entre una niña de 48 años y un hombre de más de 40 años?”.
En ese sentido, pidió al Consejo de la Judicatura estatal, que es presidido por Héctor Sánchez Sánchez, que “asuma” correctamente la investigación del caso. Asimismo, aseguró que su administración brindará apoyo institucional y legal a Vázquez y sus hijas.
“[Los] llamo por el bien de nuestra sociedad. No hay que agraviar tanto a la sociedad, no hay que agraviar los llamo a eso. Y decirles (...) que vamos a nosotros estar pendientes de todo este relato, ya hay denuncias y vamos a estar pendientes. Por eso le daremos a Miriam Vázquez todo el apoyo institucional y legal”
Es importante recordar que, tan sólo un día antes, Héctor Sánchez justificó en entrevista ante medios de comunicación que el Código Penal es “muy puntual” respecto a la clasificación de ambos delitos. Por esta razón, esquivó opinar sobre la resolución del juez León Mata. Inclusive, recomendó al gobernador “revisar” el estatuto.
“Voy a hacer una petición respetuosa, por supuesto, al Ejecutivo, para que se pueda revisar la codificación penal en el estado de Puebla. En el caso particular de un abuso sexual a una menor, en este caso de 14 años, hay una disposición muy puntual que dice que si el atacante tiene una diferencia de tres años más que su víctima, se presume las condiciones de estupro. Entonces, no quiero entrar en una situación estrictamente técnica-legal, pero sí urge hacer una revisión a la ley”, emitió entonces.
Madre exige justicia y es abusada sexualmente
Por su parte, Miriam Vázquez, al ser llamada por el gobernador a relatar su testimonio en público, expuso que las trabas que el sistema judicial le ha puesto para que le sean retornadas sus hijas no ha sido la única agresión que ha experimentado, pues uno de los funcionarios encargados de orientar su caso abusó sexualmente de ella.
Se trata del asesor jurídico que le asignó la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas de Puebla (Ceavi), Mario Ocelotl Gómez. Según relató la mujer, tras haberse reunido con él para darle seguimiento al caso de sus hijas, el hombre le “ofreció jugo”, sin embargo, la bebida resultó ser más bien una sustancia atípica, la cual le provocó que perdiera noción de la realidad. Cuando despertó, descubrió que estaba siendo violada.
Aunado a lo anterior, la desconsolada madre refirió que otro de los ataques, no físicos, pero sí institucionales, que sufrió, provino del Poder Judicial. Acusó que la decisión de León Mata de rebajar los delitos imputados contra Ramón N., sucedió gracias a la relación de amistad que el jurista tiene con Celestino Martínez Bones, juez de Zacatlán y hermano del hombre responsable de abusar de su hija.
También declaró que en marzo pasado el hombre escapó hacia la ciudad de Tijuana con las tres niñas, así como con la menor de un año de edad que su hija tuvo como producto de la violación sexual que sufrió. Sin embargo, al hacer la denuncia, el médico legista encargado de determinar las agresiones físicas contra ella desestimó las heridas, sostuvo la mujer.
Finalmente, Miriam Vázquez aclaró que su único objetivo es resguardar la integridad de las niñas, de las cuales dos de ellas se encuentran bajo cuidados del Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (SEDIF).
“Mi objetivo siempre ha sido encontrar a mis hijas. Desde que empecé todo esto, el objetivo fue encontrar justicia para mi hija. Y cuando yo decidí tomar ese paso, a levantar la voz, me quitan a mis hijas”, concluyó.
