La diócesis de Puebla, en conjunto con la de Tlaxcala, Tehuacán y Huajuapan iniciaron este domingo un “octavario” de oración para pedir a la Virgen de Ocotlán por el fin de la pandemia y que interceda por la salud de los enfermos.
Durante la misa dominical, el arzobispo Víctor Sánchez Espinosa explicó que en 1541 la Virgen de Ocotlán libró al pueblo de una epidemia, mostrando a Juan Diego un agua curativa para todos los que corrieran riesgo, en el mismo sentido, en la actualidad, las personas están llamadas a confortarse y ayudarse entre sí.
“En nuestras familias, amigos y vecinos, sacerdotes y religiosas los estragos de la pandemia son irreparables, pérdida de seres queridos, dolor de tantos enfermos y sus familias que no pueden estar cerca de ellos, personal sanitario desgastado y en riesgo, al poner en peligro su vida por ayudar a sus hermanos, pérdida de trabajo, aumento de la pobreza, miedo e incertidumbre del futuro”, dijo.
El arzobispo exhortó a los ciudadanos a guardar su confinamiento y no salir de casa a menos que sea necesario, adoptando todas las medidas de cuidado para evitar los contagios de Covid-19 que continúan en ascenso.
La jornada de oración por ocho días, en las cuatro diócesis, estará vigente desde este domingo 5 de julio a las 10 de la mañana y hasta el domingo 12 de julio a la misma hora.