En la entidad, siete de cada 10 niños con cáncer llegan en etapas tardías para recibir atención médica, así lo aseguró la oncóloga pediatra Maricarmen Garza González, de la Fundación Una Nueva Esperanza, hecho por el que incentivó a los padres de familia estar al pendiente de cualquier cambio de comportamiento en la salud que presenten los menores.

En entrevista con este medio, la especialista destacó que septiembre es el mes que a nivel internacional se eligió para conmemorar la Concientización del Cáncer Infantil, no obstante, enfatizó que la reflexión sobre este tema debe ser permanente, motivo por el que, a través de un webinar, compartió con personal de la salud y padres de familia la importancia de detectar a tiempo la enfermedad.

“De cada 10 niños con cáncer, 7 llegan con estadios avanzados; si es tumor, estadio 3-4; y si es leucemia, ya son leucemias de alto grado y no depende de un diagnóstico tardío sino simplemente por la agresividad de la enfermedad y muchas veces depende del factor genético del paciente”, indicó.

Garza González destacó que el cáncer infantil es la primera causa de mortalidad en menores de 15 años, después de los accidentes. Refirió que las leucemias agudas son el tipo de cáncer que prevalecen en la población infantil, siendo los signos y síntomas más frecuentes: cansancio extremo, fiebre, palidez en las palmas de la mano y alrededor del rostro, sangrados frecuentes de la nariz y moretones en sitios que no son frecuentes de golpear.

El tipo de cáncer que ocupa el segundo lugar son los tumores cerebrales. Estos por lo regular, indicó, se manifiestan con dolores de cabeza intenso, vomito, el menor camina sin equilibrio, también presenta agotamiento e incluso registra un retroceso en el aprendizaje.

En tercer lugar se encuentran los linfomas, que son los tumores de los ganglios linfáticos que son los que ayudan a drenar las toxinas del cuerpo. Estos tumores, explicó la especialista, se presentan en el cuello, axilas y la ingle.

Ante este panorama, la oncóloga insistió en la importancia de estar al tanto de los síntomas que los infantes presentan a lo largo de su crecimiento y de acudir a revisiones con el médico de primer contacto para realizar la vigilancia del Niño Sano que consiste en analizar el desarrollo psicomotor y otra serie de datos de salud del menor.

“La recomendación es estar al tanto al cambio de comportamiento en los niños, principalmente ahorita por la contingencia. No todos los cambios son malignos, y no tengan miedo de conocer a los oncólogos. En caso de que haya presencia de la enfermedad siempre tienen opciones de tratamiento y más, si se diagnostica a tiempo”, compartió.