La temporada de influenza estacional 2023-2024 dejó como saldo siete decesos durante el año pasado, lo que muestra una disminución de 53.33 por ciento en comparación con el 2022, cuando hubo 15 muertes, informó la Secretaría de Salud federal.
En el último informe del año pasado, la dependencia estatal dio a conocer que Nuevo León encabezó la lista con 16 de funciones, seguido de Hidalgo con 12, Michoacán con 10, Ciudad de México con ocho y Puebla con siete.
A nivel nacional, es decir, por las 32 entidades federativas se reportaron 94 fallecimientos a causa de la influenza, infección vírica que afecta principalmente a la nariz, la garganta, los bronquios y, ocasionalmente, los pulmones, como menciona la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En tanto que, a través del panorama epidemiológico se registraron 3 mil 081 casos que estuvieron en vigilancia, de los cuales 211 fueron positivos a influenza estacional, la que inició en octubre pasado y se espera que termine en febrero o marzo.
De acuerdo con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), este virus se transmite de persona a persona por medio de gotitas de saliva que se expulsan al estornudar o toser, las cuales pueden entrar al organismo por la boca, nariz y ojos.
También una persona se puede contagiar al saludar de mano, beso o abrazo a una persona enferma de una infección respiratoria, además de tocar superficies previamente contaminadas, tales como mesas, teclados de computadora, artículos deportivos, manijas, barandales, teléfonos, pañuelos desechables y telas.
Algunos de los síntomas que se pueden presentar son: fiebre arriba de 38 °C, tos, dolor de cabeza, escurrimiento y congestión nasal, dolor de articulaciones, decaimiento (postración), dolor de pecho, dolor de estómago y diarrea.
