Este lunes, alumnos de los diferentes niveles escolares regresaron a clases de manera virtual, sin embargo, no todos lo hicieron de la misma manera, algunos optaron por los canales de televisión, otros por videollamadas con maestros, unos más por radio y, los que tuvieron complicaciones con la tecnología, eligieron los libros de trabajo.
Si bien, las herramientas que eligieron fueron diversas, en lo que sí coincidieron los alumnos fue el hecho de extrañar a sus compañeros y la orientación de los maestros pues, desde su perspectiva, es más divertido y aprenden más.
Al menos ese fue el sentir de Yabed Salomón, un niño de 7 años de edad quien actualmente cursa el segundo año de primaria.
Acompañado de su papá, Salomón se dispuso a ver su primera clase virtual por televisión, sin embargo, la sorpresa que se llevaron fue que su televisor no detectó el canal por lo que descartaron dicha posibilidad. Otra de sus opciones era ver el programa en la tableta, pero la situación económica por la que actualmente atraviesan no les permitió hacer la contratación del internet.
Fue por ello que optaron por darle continuidad a los temas del ciclo escolar con el apoyo de los libros de trabajo y hacer las actividades en la libreta. “Estoy haciendo 10 oraciones en mi libreta, cinco sumas y cinco restas, voy a leer 10 minutos y a buscar las palabras desconocidas”, compartió el pequeño desde la sala de su casa.
Óscar Sánchez, papá de Salomón, comentó que a petición de la maestra, todas las evidencias estudiantiles las tendrán que enviar diariamente por correo electrónico, no obstante, tendrá que solicitar el apoyo de sus vecinos para que le permitan enviar la tarea toda vez que, aunado a carecer de internet, el ciber más cercano a su domicilio se mantiene cerrado a causa de la contingencia por coronavirus.
Indicó que durante el resto de estos días buscará la manera de adecuarse a las actividades que solicite la maestra para que su hijo no se atrase en los temas y de esta manera, pueda cumplir en tiempo y forma con los ejercicios.