El bebé japonés que nació pesando sólo 268 gramos, alrededor de una décima parte de lo normal, fue dado de alta tras permanecer en el área de terapia intensiva alrededor de cinco meses, tiempo en el que alcanzó los 3.238 kilogramos.
La mamá dijo: “Estoy feliz de que haya aumentado tanto de peso, sinceramente no creía que pudiera sobrevivir”, una vez que el hospital en Tokio dio luz verde para que el pequeño regresara a casa para seguir creciendo.
Esta hazaña lo convierte en el recién nacido más pequeño en el mundo que logra sobrevivir.
Este pequeño nació en agosto pasado a través de una cesárea de emergencia debido a que su peso no aumentó a las 24 semanas de gestación (de un total de aproximadamente 40) y su vida corría peligro, señaló el Hospital Universitario Keio de Tokio, citado por la prensa local.
El bebé cabía en un par de manos y después de ser criado en cuidados intensivos neonatales por casi medio año dejó el hospital la semana pasada, pero hasta ahora fue dado de alto y se le está alimentando normalmente en casa.
El Hospital, citado por la agencia de noticias Kyodo, señaló que después de ser tratado, al controlar su respiración y nutrición, creció constantemente y fue capaz de ser amamantado.
El bebé, que ha ganado 12 veces su peso al nacer, es el más pequeño nacido para ser dado de alta sano de un hospital, reiteró.
El caso más cercano fue un niño nacido en Alemania, con un peso de 274 gramos, en 2009, de acuerdo con una base de datos de los bebés más pequeños del mundo de la Universidad de Iowa, según la cual los niños tienen una tasa menor de supervivencia que las niñas.
Ha habido 23 niños en el mundo que nacieron prematuramente por debajo de los 300 gramos, y sobrevivieron, y de ellos solo cuatro son niños.
(Con información de Notimex)
