Aunque ayer fue llevado a audiencia el principal sospechoso de la muerte de la ucraniana Yaroslava solo por desaparición de persona, se realizó a puertas cerradas, lo anterior, porque podría atentar contra la dignidad de la mujer, según argumentó el Ministerio Público, lo cual fue poco convincente para el Juez de Control; sin embargo, aceptó la petición. Finalmente, al acusado se le imputó el delito inferido y como medida cautelar se le impuso la prisión preventiva en el Cereso de San Miguel, mientras continúa su proceso penal.

El juez advirtió que solo sería en esta audiencia y, en caso de llegar a la vinculación a proceso, que por estrategia legal no sería en esta audiencia; posteriormente se haría de manera abierta.

Así, ya en la audiencia inicial, donde solo se quedaron la defensora pública del acusado y los agentes del Ministerio Público, estos lograron imputar a Alfonso N. el delito de desaparición de particulares, al ser la última persona con quien presuntamente estuvo la también nacionalizada mexicana.

Ante eso, se ordenó el traslado del presunto responsable al Cereso de San Miguel, mientras continúa su proceso penal, quedando como fecha el próximo martes para resolver la vinculación o no a proceso, por ese delito.

Como se recordará, según los datos aportados por la Fiscalía General del Estado, Yaroslava, después de estar conviviendo con su pareja sentimental, el 10 de los corrientes salió a un Oxxo, sin embargo, llegó hasta Santa María Tonantzintla en San Andrés, donde se encontró con Alfonso, y este la llevó hasta su casa en Huejotzingo. Por alguna razón -que hasta el momento se desconoce- el hombre la asesinó y luego descuartizó para finalmente abandonar los restos en un terreno de siembra cerca del Aeropuerto Internacional Hermanos Serdán, donde fueron hallados la tarde del miércoles pasado.

La Fiscalía precisó que se esperan algunas diligencias y resultados de estudios, por ejemplo los antropológicos, que ayudarán a determinar que los restos encontrados sean precisamente los de la ucraniana; aunque se tienen otros indicios como prendas de vestir y 14 tatuajes, que orientan a presumir que se trata efectivamente de Yaroslava.