Ambrosio Guzmán Álvarez, director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (Puebla), indicó que de las 36 monedas y medallas robadas el pasado 27 de diciembre en el Museo Fuerte de Guadalupe, solo una era de plata y el resto eran de bronce y de cobre, por lo que el valor histórico de estas asciende al valor material que pudieran tener.
En entrevista con El Sol de Puebla indicó que la persona que planeó el atracó sabía perfectamente del valor legendario, porque, a pesar de que en la vitrina también había un encendedor, únicamente se enfocaron en las monedas.
“Eran monedas conmemorativas y el monto económico es casi imposible saberlo. La persona que lo hizo tenía un interés especial en esas piezas porque enfrente de la vitrina había tres computadoras y no les interesó, también había un encendedor histórico y no se lo llevaron, solo se llevaron las monedas”, indicó.
Agregó que, debido a que también robaron el CPU y las cámaras del sistema de vigilancia, la Fiscalía General de la República (FGR) les sugirió adquirir un nuevo equipo de seguridad con tecnología de punta para garantizar el resguardo del inmueble.
Al cuestionarle si el gasto de este nuevo equipo de seguridad correrá a cargo del INAH Puebla, detalló que será imposible toda vez que el instituto atraviesa por una crisis económica y no cuentan con los recursos necesarios, motivo por el cual solicitarán el apoyo del Gobierno del Estado para la compra del mismo.
Del mismo modo indicó que ya solicitaron a los tres niveles de gobierno que los apoyen con la vigilancia de la zona para evitar que se repita una situación de esta naturaleza, así como también pidió que se refuerce la vigilancia en el Museo de Arte Religioso de Santa Mónica.
Por último, mencionó que hasta el momento no se tienen pistas de los ladrones pues, de acuerdo a declaraciones del guardia, los atacantes ingresaron cubiertos con paliacates, sin embargo, la FGR ya realiza las investigaciones correspondientes para dar con los responsables de este hecho.