Una manera de comprobar muchas de las cosas que ahora conocemos e incluso de materializar objetos que diariamente utilizamos, es mediante la investigación científica y una de las principales tareas de las que esta se encarga es del estudio de los efectos que un medicamento o enfermedad pueden tener en las personas, para lo cual en muchas ocasiones son utilizados algunos animales.
Aunque esta práctica no es una que haya surgido de la casualidad, sino que comenzó a utilizarse luego de que confirmara que los organismos de algunos animales son similares en sus estructura y funcionamiento al de los seres humanos, siendo el sector médico y farmacéutico los que más lo han utilizado, pero existe una especie en específico que es la que más vidas ha salvado.
¿Cuál es el animal de laboratorio que más vidas ha salvado?
Aunque suela pensarse que el animal más utilizado es el ratón, pues suele pensarse que es el único utilizado en las pruebas de laboratorio, lo cierto es que existen otros sistemas vivos de investigación e incluso más precisos para los fines que son utilizados, pues la elección de estos modelos se determina con base en la similitud biológica entre ellos y los humanos.
Cabe aclarar que ninguno es idéntico, pero esto ha sido posible debido a que son similares, facilitando la extrapolación de los resultados, aunque es Drosophila melanogaster, quien destaca por su simplicidad y relevancia biológica, mismo que pese a tener un corto ciclo de vida, es fácil de criar, además de que su compartición es aproximadamente del 60% de genes con los humanos.
Pero si este nombre no te suena quizá lo haga el de la mosca de la fruta, misma que se ha convertido en pieza fundamental de distintas investigaciones que han sido fundamentales para la preservación de la salud humana y dentro de los más notables se encuentra la ayuda que brindó para conocer los beneficios del resveratrol, un compuesto presente en el vino tinto.
Y es que este componente ha sido estudiado por sus posibles propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, por lo que fue un experimento con las moscas de la fruta mediante el que se pudo explorar la manera en que esta sustancia tiene un efecto en la longevidad y la salud, abriendo la posibilidad al desarrollo de terapias que permitan mejorar la calidad de vida.
¿La mosca de fruta ha servido para el estudio de la Covid-19?
En cuanto a su utilización en más recientes trabajos, en el caso de la Covid-19, si bien este diminuto ser no se puede contagiar del virus, sí ha funcionado como un instrumento para estudiar aspectos específicos de la respuesta inmune, además de evaluar posibles tratamientos, esto debido a la versatilidad y relevancia de los modelos animales incluso en situaciones de emergencia.
Finalmente, este diminuto ser también marcó un hito en la medicina con el estudio de la rapamicina, la cual destaca por sus propiedades inmunosupresoras y antitumorales, en los que Drosophila melanogaster ayudó a comprender como esta sustancia afecta al envejecimiento y al reloj biológico, dando pie a exploraciones más profundas para ralentizar este proceso.