El gobernador Miguel Barbosa Huerta anunció que el viernes dará a conocer un reacomodo en el esquema del regreso a la “nueva normalidad” programado para el 15 de junio, esto ante el panorama que se vive en Puebla por el incremento en los contagios de Covid-19.

Los lineamientos para el regreso a la nueva normalidad están previstos para el próximo 15 de junio y en estos, se señala que la industria automotriz y la de la construcción reanuden sus operaciones en un 30 por ciento, igual que restaurantes y cafés que operarán con aforo reducido. Todos deberán apegarse a los protocolos sanitarios.

El gobernador detalló que el comportamiento de la pandemia se evaluará y conforme al análisis se determinarán las modificaciones en los lineamientos para las actividades, incluyendo las declaradas como esenciales por la federación, que en este caso son la industria automotriz y la de la construcción, las cuales, reconoció, serán difícil de aplazar para su regreso gradual.

Recordó que la federación permitió a estas dos industrias iniciar actividades desde el 1 de junio, pero en el estado de Puebla se difirieron dos semanas más, estableciendo en un decreto que no había condiciones para la reanudación de sus operaciones, el cual podría volverse a emitir ante el panorama actual de la pandemia.

Por otra parte, Miguel Barbosa le pidió al titular de la Secretaría de Gobernación, David Méndez Márquez que aplique clausuras a comerciantes del Centro Histórico, que tengan sus negocios abiertos, porque muchos de ellos juegan con la autoridad y pese a ser negocios no esenciales, están operando.

“Nos ponemos en los zapatos y en las necesidades de la gente, estamos conscientes de ello, pero ya se volvió una especie de jugar al gato y al rato, aquí en el Centro Histórico pasa la autoridad y cierran, se va la autoridad y abren, la autoridad municipal no se mete, son cosas ya anómalas, desafían a la enfermedad con ese comportamiento, se arriesgan todos y arriesgan a todos”, dijo.

Se debe mencionar que durante el fin de semana la dependencia sólo clausuró dos comercios de los más de 124 que revisó durante recorridos, pues más de una centena accedieron a cerrarlos de forma voluntaria.