La creciente contaminación en la Cuenca del Río Atoyac, ubicado entre los estados de Puebla y Tlaxcala, desató una serie enfermedades crónicas en al menos 13 comunidades de dichas entidades.
Esto advirtió Laura Méndez Rivas, integrante del colectivo Por un Atoyac con Vida, durante el segundo Foro Regional “Diálogo entre comunidades, academia y gobierno sobre la problemática multidimensional de contaminación en la Cuenca del Alto Atoyac”, realizado en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP).
En su intervención, la activista reveló que, desde hace 20 años, inició un trabajo interdisciplinario entre diversidad universidades del país, el cual dio como resultado que en dicha zona hay un sinfín de sustancias contaminantes.
Estas sustancias no solo han provocado enfermedades entre la población de dichas comunidades, entre las que resaltan San Lucas Atoyatenco, Tepetitla de Lardizábal y Santiago Michac, sino también el deceso de varios habitantes, insistió.
“Tenemos investigaciones responsables para demostrar al Estado que estamos expuestos a múltiples sustancias contaminantes que, además de provocar enfermedades graves, también han provocado la muerte”, dijo.
De acuerdo con un estudio realizado en 2016 por la científica Regina Montero, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), se evidenció que las niñas y niños entre 8 y 12 años de edad (que viven en estas zonas) están en mayor exposición a desechos industriales en comparación con personas del mismo rango de edad que no viven cerca de la Cuenca.
Las enfermedades más comunes detectadas en la población infantil y adulta de esta zona son cáncer, problemas cardiovasculares y de desarrollo.
Estos resultados fueron con base en estudios de biomonitoreo y de genotoxicidad, que confirmaron el aumento de enfermedades crónicas no transmisibles y daños tóxicos a su población.
“No hay justicia social sin justicia ambiental”, finalizó Méndez Rivas, quien hizo un llamado a las autoridades ambientales de ambos estados y a nivel federal a atender esta problemática que cada vez aquejara a un mayor número de habitantes.