El nuevo sistema de justicia penal podría evitar lacriminalización de la pobreza en los indígenas, es decir, queestén recluidos en prisión como consecuencia de la falta derecursos económicos para defenderse, consideró la directora delInstituto de Derechos Humanos Ignacio Ellacuría de la UniversidadIberoamericana de Puebla (Ibero Puebla), Ileana GalileaCariño.
A propósito de la conmemoración del Día Internacional de losPueblos Indígenas y la falta de traductores e intérpretes delenguas originarias para enfrentan algún proceso legal, laespecialista en Derechos Fundamentales, consideró que el nuevoesquema de Procuración de Justicia que privilegia la reparacióndel daño, la celeridad de los procedimientos y los juicios orales,pueden beneficiar sensiblemente al sector, pues la mayoría de laspersonas indígenas que se encuentran en prisión son casos de“criminalización de la pobreza”.
Explicó que este concepto aplica a los casos en que lospresuntos responsables cometieron algún delito menor, del fuerocomún, principalmente, por el que podrían alcanzar libertad bajofianza o gozar de una mejor defensa para enfrentar su proceso, perocarecen de recursos económicos para lograrlo.
Y lamentó, esta es la situación en la que se encuentran másdel 90 por ciento de los indígenas en prisión.
Consideró que dadas las características del nuevo sistema dejusticia penal, en el que los presuntos responsables de algúnilícito pueden recurrir a los acuerdos de reparación de losdaños, la probabilidad de que un indígena sea recluido enprisión se reduce.
No obstante, la directora del Instituto de Derechos HumanosIgnacio Ellacuría de la Ibero Puebla advirtió que tambiénimplica el reto a las autoridades de que cuenten con el personal ycondiciones necesarias para que los indígenas puedan gozar de losbeneficios del nuevo sistema de justicia penal, pues igual que enel anterior, se requieren de traductores e intérpretes que nosólo conozcan la lengua originaria, sino que además puedanexponer los usos y costumbres de las comunidades a las quepertenecen, a fin.
“Es decir que se requiere que se refuerce no sólo cantidadsino también el contenido, con una defensa pública adecuada, conconocimiento especializado en la lengua pero que también puedacomprender la cultura y sus diferencias, eso podría ser, es justola intención y esperaremos que la aplicación sea efectiva”,remató.